¿Recuerdas la historia clásica del personajes popular que se termina enamorando del personaje menos popular de su instituto?
Bueno, creo que no estaría mal contarla de nuevo, solo que esta vez tendremos unas diferencias sociales.
[Créditos a quien...
Rubius corría para poder alcanzar a Samuel quien lo había perdido de vista hace algunos minutos, no estaba muy seguro a que parte de la escuela lo estaba dirigiendo. Se detuvo para recuperar aliento y mirar a todas las direcciones.
Fue hasta que finalmente pudo visualizarlo como el pelinegro caminaba hacia las afueras del colegio, era una parte mas de bosque por los al rededores, pero no lo dudo y lo siguió. Adentrándose a los interiores de ese pequeño bosque por fin encontrando la silueta del amado, ya no corría solo caminaba, casi no conocía esa parte de la escuela, no sabia que realmente se podía pasar por ahí.
Ya casi no era obscuridad, se encontraba un punto casi alumbrado por algunas luces, las siguió considero que era la idea de Samuel llevarlo hasta ahí.
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Era muy bello ante sus ojos, podía notar un poco de lo abandonado que estaba pero eso le daba un toque muy especial al lugar, no estaba maltratado al contrario su belleza era algo como si te transmitiera paz.
Samuel se encontraba adentrado en ese lugar, no dudo en acercarse y quedar finalmente frente a frente, solo se miraban uno con otro, solo mantenían sus miradas conectadas, parecía como si sus ojos fueran dos focos mas que se alumbraban.
Samuel: Rubius... -antes de dejarlo hablar el albino hablo-
Rubius: Antes de que digas algo -suspira- por favor, discúlpame! Se que no merezco que al menos me escuches, entiendo que tengo parte de culpa, que cometí un grave error al darte como falsas esperanzas de que íbamos a regresa, se lo que es sentirse como usado, no debí hacerte lo mismo, créeme que cuando dije que te seguí amando lo dije de todo corazón.
>> Entiendo que no quieras creerme, entiendo que piense que me quise desquitar, no es así. Ahora entiendo que todo esto que hice no sirvió de nada, la popularidad, ser el centro de atención, quitarte todo eso que eras tu, no fue correcto. Debí dejar que la vida fuera quien se encargara del karma de cada uno de nosotros.
>> De verdad trate de buscarte y pedirte perdón, se que es egoísta de mi parte todo lo que he hecho, quiero que sepas que entendí lo arrepentido que estas por lo que paso. Lo se ahora se que si, lamento por tardarme, y de verdad no se que mas decir mis días no son los mismo sin ti, no puedo ya no puedo...
Sus lagrimas de Rubius conforme iba hablando se le iban cayendo, y se mantuvo sin moverse ninguno de los dos. Samuel solo miraba con algo de ternura y una sonrisa pequeña al chico, quien bajaba la mirada en espera de cualquier respuesta. El pelinegro se acerco un poco quedando frente a el a escasos centímetro y señala abajo.
Samuel: Chiqui, solo iba a decirte que tienes las agujetas desamarradas.
Rubius: ('・ω・') -apenado, se sonroja como tomate y se las acomoda- Debí parecer un bobo.
Samuel: -se ríe- La verdad no te quise interrumpir, aun que ya sabia todo eso, te veías muy lindo. -se acerca y le limpia las mejillas y ojos- Pero no quiero volver a verte llorar, menos por mi.