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Estaba atónita. ¿Hablaba enserio? ¿Sólo porque no usé un estúpido color como todos los demás ahora ella tenía el derecho de correrme?. Esto se estaba volviendo muy tenso para mí, pero de todos modos seguía extasiada.

— ¡¿Qué?! — fue lo primero que salió de mi boca. — ¿Estás hablando enserio? — ella se encogió de hombros con pena falsa.

— Eso lo que hay. No usas rojo, no comes con nosotros. — volvió a encoger los hombros torciendo una sonrisa. Yo me estaba hartando y respiré profundamente bajando las manos antes de hablar.

— Déjame ver si entiendo. ¿No puedo comer con ustedes por no llevar un estúpido color que "complementa" al grupo, sólo porque a ti te plazca? ¿Crees que me siento bien con eso?

— No me importa en absoluto lo que pienses, pero si querías ser popular como nosotros entonces debiste acatar las reglas. Te gustaran o no. — me quedé muda. Realmente quería ser popular, pero viendo la clase de persona que era Jang, bueno... debo decir que me estoy arrepintiendo de serlo. Y más con esa actitud con la que se dirigía a mí.

— Pues entonces creo que ya no quiero ser popular. — solté todo de golpe. Esperaba a que ella abriera la boca con horror o que se sintiera ofendida por eso. Pero creo que lo que menos tiene Yeeun son sentimientos cuando de ofenderla o dejarla se trata. Ella se carga el ego por los cielos y aun así le hagas todos los desprecios del mundo parece que nada la derrumba.

Su expresión fue levantar los hombros como si me dijera "como quieras" y pensar que ella realmente me veía como a una amiga, o mejor dicho, que yo pensara que ella era mi amiga. Pero creo que lo que menos le interesa es eso, si los tiene o no, sean falsos o no, ella con tener gente a su alrededor le daba el poder de hacer lo que quiera.

Me dí la vuelta enojada dirigiéndome al patio, me senté en una banca con aŕbol detrás de ella. Saqué mi celular y busqué el contacto de Yuta. Nada. No me había escrito por chat en los últimos días. Le llamé pero solo me respondía la contestadora con la típica frase de "el número que usted marcó, está ocupado" ¿Qué más podría estar haciendo en este momento que en vez de contestarme a mí los mensajes?

Me rendí. Metí el teléfono en la sudadera, clavé mi codo en mi rodilla y llevé mi mano a la mejilla mientras mordía mi Sandwich.

(...)

Día siguiente...

No podía creerlo, no podía resistirlo más. Con las manos hechas puños caminé rápidamente hacia el pelirojo mientras abría la puerta de su casillero,  en cuanto volteó a mi dirección su semblante tranquilo cambió a uno confundido.

— ¿Puedes explicarme porque diablos no respondías mis mensajes? Te he escribido, llamado todos estos días y ni una sola respuesta tuya tengo. ¡¿Quieres decirme de una vez que carajo te pasa?! — mi respiración se volvió agitada después de gritarle, estaba esperando a que me respondiera, pero su semblante neutral me hacía perder la cabeza cuando abrí la boca para decir algo pero él me interrumpió.

— Lo siento...

— ¡Eso no basta, Yuta!

— Younnie, no te molestes conmigo. Sabías que iba a ver a mi madre porque estaba enferma, no puedes ser tan cruel de esta manera y recibirme así. ¿Al menos tienes un poco de comprensión?

¿Él me estaba pidiendo comprención? ¿Comprender qué cosa, que me ha estado ignorando desde hace más de una semana? De pronto, esto me hizo recordar a Jaemin cuando su madre estaba enferma y yo aun así quería verme con él para salir. Se siente muy mal pensar así por una parte, pero ¿por qué estoy pensando en Jaemin en momentos como este? ¡Dios, quítamelo de la cabeza!

𝖢𝗁𝖺𝗇𝗀𝖾 ➸ 𝖩𝖺𝖾𝗆𝗂𝗇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora