Capitulo 8:

1.8K 237 78
                                    

Jaxon habla demasiado mientras nos estamos ajustando las cuerdas para subir al helicóptero, tanto que incluso a mí me resulta irritante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jaxon habla demasiado mientras nos estamos ajustando las cuerdas para subir al helicóptero, tanto que incluso a mí me resulta irritante. No estoy segura de si está tratando de impresionar al tipo éste que está a mi lado con su mascara, Nikto, creo que se llama que lo mira fijamente como estuviera prestándole atención pero que parece que en cualquier momento le va a clavar uno de sus cuchillos en la frente.

—Me caes mejor cuando estás callado niño — le dice con la voz ronca, me río por lo bajo y él nota que me he reído y su mirada fría me causa escalofríos — en cambio tú, habla.

—Aquí no — Kim aparece desde algún lado mientras yo me termino de amarrar las cuerdas de la mochila y Nikto se vuelve a mirarlo —.

—¿Qué? ¿Por qué no? Es linda —.

Mis mejillas se ponen rojas.

—Si pero — Kim lo mira y niega con la cabeza sus expresiones ocultas bajo su mascarilla, menos sus ojos que me miran. Seguramente no dice nada porque Jaxon está ahí y me pregunto ¿Cuánto sabrá Kim de mi y del Coronel? debe saber algo, algo mucho — simplemente no.

Nikto se queda sumido en alguna especie de trance mientras mira a Horangi alejarse hasta los otros, vigilando que no se hagan daño mientras se tiran de la cuerda hacia abajo en el río. Llama a Jaxon desde ahí y cuando él se va miro a Nikto con curiosidad.

—¿Te estás cogiendo a König? —.

¿Qué? — mis ojos se abren más de lo normal —.

—Lo huelo en ti — se acerca un poco — sí, definitivamente sí —.

—Oye — lo empujo hacia atrás —.

—Tranquila — una risa extraña se le escapa de algún lado bajo la mascara — no sabía que ese cabrón tenía tan buenos gustos, eres muy bonita — sus ojos azules me miran casi sin pestañear — si no fueras suya estaría sobre ti todo el tiempo — cuando pestañea trago con dificultad, no estoy segura como tomarme lo que me ha dicho — lo siento, ¿Te incomodé? — su mano se cierne alrededor de mi brazo — no quise ser grosero, a veces soy demasiado honesto conmigo mismo y digo lo que pienso sin pensarlo antes —.

Inevitablemente me río y niego con la cabeza.

—No pasa nada — quito su mano y palmeo su brazo — supongo que nos parecemos un poco, entonces — él se ríe entre dientes y mientras se ajusta las cuerdas de la mochila de paracaídas continua mirándome —.

—Entonces ¿Es cierto que eres la alumna prodiga de Price? —.

—No sé si prodiga, pero sí... — encojo los hombros caminando hasta el helicóptero — ¿Lo conoces? —.

—Casi me mata — dice — pero teníamos un enemigo en común y nos aliamos. Es un buen enemigo, se me pone la puta piel de gallina por su culpa —.

𝑩𝑨𝑫 𝑹𝑶𝑴𝑨𝑵𝑪𝑬 ➝ 𝑲𝑶̈𝑵𝑰𝑮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora