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︵‿︵ʚɞ『Capítulo 011』ʚɞ‿︵‿︵
Durante el desayuno mientras Sirius se copiaba de los deberes de James; y Regulus comía con rapidez un postre que había agarrado de puro milagro, ocurrieron dos cosas que ninguno se esperaba.
James casi se atraganta cuando vio a un cuervo negro llegar junto a las lechuzas y Sirius se cayó de su asiento cuando, por el rabillo del ojo, había detectado a Remus hablando con Minerva.
—— ¡Me tengo que ir! —— grito Sirius antes de levantarse y salir corriendo del comedor con la esperanza de alcanzar al castaño.
Regulus se había arrimado con rapidez cuando su hermano había salido disparado fuera del comedor, para cuando quiso voltear a ver a James y preguntarle qué rayos había pasado guardó silencio al ver al cuervo.
James se acercó al ave con cuidado intentando quitarle el trozo de papel que tenía en el pico perfectamente envuelto. Cuando lo tuvo en las manos, el ave voló a su hombro y se restregó con su mejilla.
—— Yo también estoy feliz de verte —— susurro con alegría para luego abrir la carta, reconoció de inmediato la letra de su padre.
—— No sabía que tu familia tuviera un cuervo —— mencionó Regulus en un susurro a lo que tanto James como el cuervo alzaron las miradas para observarlo.
Regulus se retorció en su sitio; esa ave lo ponía incómodo. El ave lucía sorprendido como si recién notara su presencia.
—— Mi familia es... peculiar —— fue lo único que le dijo James antes de levantarse de la mesa, aun con el cuervo en su hombro y salir del lugar —— ¿En serio? ¿No podías ser más discreto? —— preguntó con un deje de molestia que fue reemplazado por dolor cuando el ave picoteo su cabeza.
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Para cuando Sirius había logrado salir del comedor, solo se encontró con su jefa de casa a punto de entrar al comedor.
la mujer lo miro extrañada, pero de igual modo le sonrió con tranquilidad.
—— ¿Sucede algo, señor Black?
Sirius hizo una mueca ante eso; en su universo Minerva solía llamarlo por su nombre y no su apellido sabiendo lo mucho que le molesta estar emparentado a sus padres.
