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i know places - Taylor Swift
Narrador 30 de agosto, 2023
La habitación estaba sumida en una quietud profunda, solo interrumpida por el suave murmullo de sus respiraciones entrelazadas.
El tacto de la piel contra piel enviaba corrientes eléctricas de emoción por sus cuerpos. Cada caricia, cada beso era un lenguaje silencioso que transmitía su amor más profundo. No necesitaban palabras para expresar lo que sentían; sus cuerpos hablaban por ellos.
Facundo tomó suavemente la mano de Pablo, sus dedos entelazándose con una ternura que reflejaba amor y complicidad. Pablo cerró los ojos por un momento, absorbiendo la calidez de ese gesto. El latido de sus corazones parecía resonar al unísono.
Pablo se acercó lentamente a Facundo, sus labios encontrando los suyos en un beso que parecía contener todo el amor que sentían uno por el otro. Cada roce de sus labios era una promesa de entrega total, un recordatorio de la intensidad de su conexión.
Acarició suavemente el rostro de Pablo, sus dedos siguiendo los contornos de sus labios, su barbilla, su cuello. Los ojos de Pablo brillaban con una mezcla de pasión y vulnerabilidad, y sus manos exploraban con ternura cada rincón del cuerpo de Facundo.
Con cada beso compartido, se sumergían más profundamente en su conexión, como si estuvieran descubriendo el uno al otro una vez más. Cada suspiro se convertía en un eco de su deseo compartido, una sinfonía de emociones que llenaba la habitación.
Con movimientos cuidadosos, se deshicieron de sus ropas, desnudando no solo sus cuerpos, sino también sus almas. Cada caricia era un eco de su amor, cada beso un símbolo de su entega mutua. Se exploraron con manos temblorosas, compartiendo sus deseos más profundos en un acto de pura intimidad.
Sus movimientos eran suaves y deliberados, cada caricia cargada de significado. Se entregaron mutuamente no solo físicamente, sino también emocionalmente, compartiendo sus miedos más profundos y sus sueños más íntimos en ese momento sagrado.
Las lágrimas de felicidad brillaban en los ojos de Facundo mientras recorría el cuerpo de Pablo con sus manos y labios. Cada sensación era intensa, cada gemido una melodía de pasión compartida. En ese momento, se sintieron completos, como si finalmente hubieran encontrado el lugar al que siempre pertenecieron.
Cuando finalmente se perdieron en el clímax compartido, se abrazaron con fuerza, sintiendo el latido de sus corazones contra sus pechos.
31 de Agosto, 2023
El resonar insistente del timbre invadió la quietud de la habitación, sacudiendo a Pablo de su sueño profundo. Inmediatamente, sus sentidos se pusieron alerta, preguntándose quién podría estar perturbando su paz a esta hora tan temprana.
