Sentimientos ocultos.(sinbadxjafar)

Capitulo 18

Ja'far se giro para observar quien era el visitante, aunque por lo varonil que se oía, dedujo que era Hinahoho, su padre adoptivo de cierto modo. El albino nunca pudo llamarlo padre, creía que eso seria un exceso de confianza con el mayor, ya que si bien su difunta esposa lo acogió como su hijo, Hinahoho nunca parecía verlo mas allá de un simple compañero de viaje. No obstante  ahora se encontraba frente suyo, tomando asiento en un taburete incómodamente pequeño para su gran tamaño. Sus miradas se mantenían fijas en el otro.

Un silencio prolongado se instauro en el lugar, pero no era incomodo, al menos no tanto. Casi por instinto, el pecoso llevo su mano a su vientre, ligeramente abultado.

Hinahoho: ¿Cómo estas llevando el embarazo campeón? .- Soltó sin mas aquella frase paternal, haciendo que una sonrisa adornase finalmente su rostro.- Así te ves mejor... Ja'far, yo se que nunca fui una figura paterna para ti, quizás por miedo mas que otra cosa, se que es algo tarde para decirlo, pero te veo mi hijo, el mayor de todos, quiero compensarte el no haberlo demostrado antes

Sin quererlo, el de imuchakk leyó su mente, sus dudad e inseguridades; fue que finalmente la poca coraza que quedaba en Ja'far se desplomo, haciendo que se lanzara a abrazarlo, llorando en el proceso.

Ja'far: Perdón, quizás es por el embarazo.- Se excuso, hundiendo su rostro en la calidez de los brazos de su padre.

Hinahoho: Tonterias, es normal que estés nervioso y asustado

Ja'far: No es solo eso. Estoy feliz, mas de lo que siento merecer, por eso temo que todo esto sea un sueño y que mañana cuando abra los ojos despierte en el sucio agujero de donde vengo. Obligado a matar para poder existir otro día.- El mayor toma su rostro para secar el rio que manchaba sus mejillas, sonriendo enternecido, el lo comprendía, sintió lo mismo cuando se junto con Rurumu.

Hinahoho: No pienses eso, mereces esto y mas, ahora vas a formar tu propia familia y yo no podría estar mas orgulloso de mi primogénito. No solo eres un hombre amable y valiente, eres un gran guerrero, un gran hermano mayor ¡Hombre, el tamaño de Kikiriku te lo debo a ti! Se que podrás afrontar con lo que tener hijos conlleva, pero también, debes saber que cuentas con mi apoyo para lo que sea.- Con cuidado coloco una de las bandas que se entregaban al convertirte en hombre en la tribu Imuchakk. El máximo reconocimiento de un padre, la señal de que el polluelo ya estaba listo para abandonar el nido.- Ahora deja que las chicas terminen de arreglarte para que le digas que si a nuestro tonto rey. Sinbad no ha dejado de caminar de un lado a otro, Yamuraiha teme que abra un hueco en el piso

El comentario inesperado logro hacerlo reír, logrando espantar la nube negra que oscurecía sus pensamientos. Miro su reflejo en el espejo de metal pulido; sin duda su yo mas pequeño jamás creería que era él.

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Al cabo de una hora, la ceremonia por fin dio comienzo, el lugar podía definirse como majestuoso y místico, como si se tratase de una etérea visión de un mundo de ensueño. Sinbad se encontraba en el altar, vistiendo un atuendo elegante, con las joyas de sus Dijiin iluminando su piel bronceada. El pobre hombre se moría de los nervios, era la primera vez que no estaba seguro de como terminaría todo, Ja'far era el primero en cautivarlo en todo sentido, ya no podía ver un mundo donde el albino no estuviese a su lado, y si tal mundo existía era seguramente el mismísimo infierno.

Todo quedo en silencio, El tiempo se ralentizó. Y al compás de una suave melodía, con pétalos lloviendo del cielo, siendo producto de algún hechizo de Aladdin, el chico arribó su cabello albino brillaba con el sol, y las joyas que lo adornaban sólo resultaban su belleza natural. Sinbad se quedó sin habla, mirando anonadado a el que sería padre de sus hijos. Y su futura reina. A paso lento se fue acercando a él haciendo que su respiración se contuviera. Era chistoso verlo nervioso; incluso los generales se aguantaban la risa. Algunas mujeres dentro del público lloraban emocionadas, gritando incluso cuando los enamorados se tomaron las manos, y bajo antiguas ceremonias Rametoto (quien por ser mayor) guio la ceremonia, claro que Ja'far y Sinbad solo tenían ojos para ellos.

El tan esperado beso finalmente llego, y con ellos una celebración escandalosa, todos gritaron de emoción y euforia, su rey finalmente tenia consorte, alguien que le ayudaría a guiar su reino.

La fiesta comenzo, bailes y shows se presentaban; es una gran mesa se encontraban sentado el circulo mas cercano de los recién casados, con un Drakon intentando consolar a un Hinahoho borracho, el hombre lloraba que su pequeño ya estaba casado y un montón de cosas mas que hacían reír a los presentes.

Hinahoho:  ¡PEro No esss Justo! .- Arrastrando las silabas al hablar lograba hacer que el cerebro de Drakon se estancase un buen rato para entenderle.

Drakon:  ¡Creía que ya lo habías superado!

Sharkkan: Y lo que le falta, ya pronto sera abuelo y seguramente se pondra peor al ver a su primer nieto

Ja'far: No me digas eso, ya de por si ha estado toda la cena alimentándome a montones para que el bebe nazca "grande y fuerte", siento que voy a estallar .- Se quejo con cara de asco al sentirse hastiado; cabe decir que su mano se mantenía entrelazada con la de su ahora esposo.

Sharkkan: Pobre de ti, yo me libro de esas cosas.- Rio victorioso antes de recibir un golpe en la frente, el albino le había lanzado una pera.- ¡Oye!

Sinbad: Yo que tu no hablo mucho, que sin lugar a duda pronto deberemos viajar a tu pais para celebrar tu boda con Masrur y seguramente nos salgas con la noticia que de que estas esperando trillizos.- Eso logro hacer que el de piel morena se horrorizara, si bien tener un hijo era un plan para su futuro, no sentía que fuera el momento correcto, además de que no le apetecía tener a tres minis yo corriendo por alli ¡¿Y si salían con la fuerza y velocidad del fanalis?! Se giro a verlo, el susodicho se encontraba arrasando con la carne, aunque con su siempre confiable expresión estoica.

Sharkkan:  ¡Pero di algo maldición!

Masrur: 4

Todos: ¿Mm?

Masrur: Me gustaria que fueran 4 bebes

Sharkkan de repente vio todo blanco y cayo de su asiento, el albino se descojono de la risa y el resto le siguió. 

Casi nada cambio, porque casados o no, su familia seguía siendo un autentico desastre.

Pistis: ¡Yo sere la madrina!

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¿Me extrañaron? 

Yo si a ustedes, la verdad mi vida es un caos, tanto que mi tiempo y salud se han visto afectados. Peroooooo, siempre buscare actualizar

Si algo no cuadra háganmelo saber, ya que llevo mucho sin escribir, pido perdón por lo cortito jejeje