16

316 32 0
                                    


El chofer de Mauro condujo muchisimo, el camino era extraño, cuesta arriba y por momentos muy rápido, por momentos lento. Finalmente llegamos a lo que parecía el fin del mundo, o mejor dicho, del inframundo, toda la oscuridad  se frenaba de golpe y pasaba  aser una luz blanca brillante, un cielo celeste con nubes perfectas.

— D: llegamos angelito, bienvenido al cielo —sonrió y lo mire confundido— alguien quiere verte

Mire por la ventana y todo se freno un momento, era Mateo, era él. Sonreí sin poder creerlo y cuando estuve a punto de bajarme corriendo del auto, Mauro me freno.

— D: no podemos estar mucho tiempo —dijo y asenti— tienen diez minutos, suerte amor

Baje y corrí como nunca había corrido, Mateo me levanto y dio varias vueltas conmigo.

— T: yo te dije enano, te dije que no te iba a dejar solo —susurró, ambos llorabamos abrazados—

Nos sentamos en él suelo aún abrazados y se puso a contarme todo lo que estaba haciendo ahora, su alma por fin llegó al paraíso, fue recompensado por Dios luego de tanto sufrimiento en vida, ahora tenía un lugar bello donde descansar y una chancha enorme donde jugar a la pelota, me dijo que finalmente pudo reunirse con su madre y hermanito y que estaba tan feliz.

— T: quien diría que un enano tan tímido se podría de novio con el diablo —dijo y me reí- ¿te esta cuidando voy o lo tengo que rescatar?

— L: me ama —sonreí— y lo amo

Le conté varias cosas, la mayoría ya las había visto pero no me importo, el me escuchaba y se reía de mis chistes.

— D: perdon por interrumpir —dijo— tenemos que irnos amor

— L: cinco minutos más —dije sin soltar el brazo de Mateo— por favor

— T: tiene razón —dijo levantandonos a ambos— ¿te acordas lo que te dije? Siempre voy a estar con vos y te prometo que nos vamos a volver a ver

— L: te amo —dije sollozando— gracias por todo

— T: no me agradezcas tarado, tuve los mejores años de mi no vida con vos —sonrió— te amo mucho enano, búscame en los truenos

Nos dimos un último abrazo y tome de la mano a Mauro para que le guíe hasta el auto.

— T: ¡cuidado porque te cago a palos wachin! —le grito a Mauro, solté una carcajada y finalmente nos fuimos—

𝘼𝙈𝘼𝙉𝙏𝙀 𝘿𝙀𝙇 𝘿𝙄𝘼𝘽𝙇𝙊 - duki + lit killah [𝙁𝙄𝙉𝘼𝙇𝙄𝙕𝘼𝘿𝘼]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora