Terminum Mentis: MUTATIO (En Publicación)

Capítulo 10

—¿Qué hacías? —preguntó Nolan, sorprendiendo a Silver al verlo llegar a su habitación. Llevaba varios minutos esperando por él y descansaba en la cama, mirando en dirección a la puerta.

—¿No irías con Palmer y Eric? —le devolvió Silver, deteniéndose justo en la entrada. Las puertas automáticas se detuvieron en su cierre, y volvieron a retraerse.

Llevaba en la mano el intercomunicador que usaba para hablar con los chicos. Palmer y Eric no sabían que poseía uno, y siempre que lo usaba se apresuraba a guardarlo de nuevo.

Nolan lo observó por unos segundos, analizándolo.

—Sí, pero no quiero seguir dando tantas explicaciones o que continúen cuestionando si he hecho algo contigo —respondió, peinando su cabello con la mano.

—Te entiendo. Todo eso llega a ser muy estresante —devolvió Silver, entrando a la habitación—. Y por cierto, ¿dónde dejaste a Chaz? —preguntó.

—Dijo que le explicaría a sus padres, y que yo aprovechara el tiempo para descansar —respondió Nolan. Haciéndose a un lado en la cama, invitando a Silver a que se le uniera.

Silver tomó asiento, mientras que Nolan seguía acostado, llevaba una franelilla gris y un pantalón deportivo negro. Iba vestido bastante ligero.

—Está preocupado, ya no puede disimularlo —dijo Silver, jugando con el intercomunicador en sus manos, mirando a Nolan.

Nolan se distrajo mirando el intercomunicador pasar de una mano a otra y dijo:

—Sí lo sé, y no puedo culparlo. Él ha sido como mi hermano desde que llegué aquí. —Pensando en que Chaz no tenía por qué cargar con sus preocupaciones—. Pero no respondiste mi pregunta, ¿qué hacías? —agregó.

—Nada. —Se apresuró a responder Silver, ocultando una leve sonrisa.

—No tengo que usar nuestra conexión para saber que estás mintiendo —le respondió Nolan—. De hecho, eres muy malo mintiendo —agregó, jalando a Silver por la camisa y atrayéndolo hacia él.

—¡Nolan! —soltó Silver en medio de risas. Los dedos de Nolan jugaron en su cuerpo por encima de su ropa, haciéndole cosquillas, mientras que Silver se retorcía de risas.

—¿Con quién hablabas? —Continuó Nolan, mientras sostenía a Silver de espaldas a él, evitando que escapara de su agarre.

—¡Está bien! Está bien, tú ganas —dijo Silver, agitándose en los brazos de Nolan. De alguna manera el jugar de esa forma con Nolan, le había quitado en cuestión de segundos cualquier preocupación que hubiera tenido, simplemente estaba feliz.

Nolan detuvo sus cosquillas mientras que Silver rodó de su agarre quedando justo a su lado, ambos mirando el tragaluz. La luz del día apenas si podía ser apreciada.

El sol de la tarde anunciaba que pronto llegaría la noche.

Silver levantó el intercomunicador en forma de muñeca y respondió:

—Con Becca.

—¿Becca? Y de qué —le devolvió Nolan. Girando un poco su cuerpo para mirar mejor el rostro de Silver.

—Le preparará una pequeña sorpresa a Chaz —respondió Silver, girando su rostro para ver a Nolan. Los ojos café de Nolan lo miraban con cariño y pasión, que podía sentir como una onda que recorría su cuerpo.

Se acomodó mejor en su lugar quedando cara a cara con Nolan.

—No sabía que te preocupabas por Chaz de ese modo —dijo Nolan.