Lost In GoYuu's Paradise [OS]

Boys Your Age

Comenzaré a hacer playlist en Spotify para cada capítulo con canciones que inspiraron este AU.
Código en multimedia.

[Violet]

AU no relacionado con el canon de JJK.
Gojo 26 Yuuji 17.
AU inspirado en Girls Your Age de Transviolet.

Me pregunto que se sentirá ser un adolescente normal.

¿Eso siquiera existe?

No lo creo, pero de lo que si estoy seguro es que me encuentro muy lejos del prototipo estándar; y no porque me quiera dar el honorífico de especial, sino porque mi vida no es exactamente como la de cualquier adolescente promedio con sus etapas rebeldes y rabietas a sus padres.

Yo simplemente soy un joven de 17 años que corre de la inocencia como si está fuese un león, no quiero tener nada que ver con las limitantes que mi edad coloca sobre mi camino, deseo entumecer toda mi vida.

Respiré profundo sintiéndome ligeramente adormecido de la cara, mire mi mano sonriendo en mis adentros, todos en la mesa sudaban frío, sabían que era la ronda final y quien ganara se llevaría todo el dinero de la mesa, para su mala suerte habían caído en mi juego, fingir que era un novato, sacando escalas menores o pares sin relevancia, no me veían como un peligro, grave error.

—¿Juegan? — preguntó el crupier, le miré borroso entre las luces frías mezcladas con cálidas.

Uno por uno fueron mostrando su mano en la mesa, full house, escalera real, grandes barajas pero no lo suficiente para la maldición de mi suerte.

—Póker — todos en la mesa vieron incrédulos el póker de ases que bajé a la mesa.

—¡Hizo trampa! — el primer hombre neurótico se levantó de la mesa gritando.

—¡Hijo de puta tramposo tu simplemente no puedes ganar así! — no quise tentarlos más con una sonrisa, así que solo con un rostro imperturbable arrastré todas las fichas en mi dirección.

—Son juegos de azar, todo tiene probabilidades de suceder — vacíe todo en mi caja de fichas — olvidaron ese detalle.

—¡Tú no vas a irte con mi dinero! — el pequeño y delgado hombre sudoroso a mi lado me sujetó por las solapas de mi camisa negra.

Antes de que pudiera separarlo de un fuerte empujón que lo hubiera dejado en el suelo, los guardias nos separaron preguntando que estaba sucediendo.

—¡¡Este idiota hizo trampa!! Nos ha robado a todos en esta mesa — bramó el mismo hombre.

—Revisen las cámaras, no hice nada en contra de las reglas — intenté irme pero nuevamente me detuvieron los guardias.

—Señor, ¿nos puede dar su identificación?

No sé qué fue lo que me delató, ¿la preocupación en mis ojos? ¿El ligero olor a mariguana en mi ropa? ¿el trago amargo de saliva que resbaló por mi garganta ante la pregunta?

—¡¡No pueden hacerme esto!! Yo gané justamente — forcejee contra los guardias que tiraban de mi hacia la salida.

—Agradece que no llamamos a la policía para que vean a detalle tu ID falsificado, Itadori — me empujaron fuera del lugar — ¡no vuelvas!