Capítulo 30. Ejecución

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Felix se sentía estúpido y verdaderamente inútil. Había arrastrado a Tutsi hasta allí, sin ningún tipo de plan. ¿Qué esperaba, que la celda de Hyunjin tuviera la puerta abierta de par en par? ¿Que no hubieran hombres montando guardia? Era un iluso. La mujer a su lado gruñía, mostrando el primer signo de su escasa humanidad.

— Parece que Yahto y Nashua han encontrado algo muy interesante merodeando por el bosque.

Felix frunció el ceño, aquel hombre era desagradable. Lo miraba divertido, con burla, como si el que él estuviera allí le pareciera lo más conveniente del mundo.

El imponente licántropo encabezaba un serio grupo de cuatro personas que no parecían estar disfrutando tanto de su situación como él. Se encontraban frente a la vieja cabaña del consejo, arrodillados sobre la húmeda hierba mientras sus dos captores sostenían sus hombros con fuerza.

— Si no me equivoco, esta es la vieja Tutsi, ¿no es así? ¿Acaso nunca aprendes? La última vez tuviste suerte de la piedad del alfa, pero parece que las malas hierbas hay que arrancarlas de raíz. El nuevo alfa no tendrá tanta clemencia.

La mujer gruñó.

— Debo suponer que tú eres el nuevo alfa, ¿no? — Habló con amargura.

Koda volvió a sonreír con autosuficiencia.

— Soy el más indicado para el puesto, dada la situación.

— Le advertí a Hyunjin que eras una sabandija ambiciosa, pero nunca me imaginé que llegarías a estos límites.

El hombre rió sarcásticamente.

— ¿Límites? Hwang Hyunjin es un traidor.

— Hwang Hyunjin ha encontrado a su pareja predestinada.

— ¡Es un humano! No hay manera de que sean verdaderamente una pareja unida por las estrellas. — Habló Yoome por primera vez.

Kato asintió satisfecho por el apoyo de la mujer.

Felix miraba el intercambio con frustración, aquellos desconocidos estaban hablando de él como si no estuviera presente, juzgando su vida como si fuera demasiado insignificante para formar parte de la conversación.

— Mi padre era un lobo. — Espetó.

Todos quedaron en silencio y le prestaron atención por primera vez, como si estuvieran sorprendidos de que pudiera hablar.

— ¿Cómo dices, muchacho? — Preguntó la mujer loba.

— No soy completamente humano, mi padre era uno de los vuestros.

El rostro de Koda palideció y Tutsi lo miró sorprendido, al igual que el resto de miembros del consejo.

— ¡Eso lo cambia todo! Hyunjin no es un traidor, porque el chico no es completamente humano. No le ha desvelado nuestra existencia al enemigo, porque él ya sabía de nosotros — Habló la anciana.

Kota, Yoome y Lonan se miraron entre ellos, sopesando las palabras de la mujer. Un brillo de esperanza se encendió en los ojos de Felix. Koda se encargó de apagarlo.

— ¡Eso no cambia nada! — Exclamó el lobo. — El padre de este chico era otro traidor, él no es uno de los nuestros. El delito es el mismo.

Felix se revolvió y su agarre se intensificó.

— ¿¡Qué tan malo es lo que Hyunjin ha hecho!? ¡Me ha marcado, ¿y qué?! Él me ama, y yo lo amo, ¿qué hay de malo en...

— ¡Basta!

El rugido de Koda interrumpió el desesperado discurso de Felix.

— La ejecución se adelantará. Llamen a la manada y traigan a los condenados.

alpha's owner | hyunlix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora