Capítulo 5.

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"Irene Cádiz"

Salí de mi habitación antes de que las luces cambiaran, para poder bajar al primer piso con sumo cuidado. Tomé mi bolso y me apresuré por el pasillo. Pero luego escucho a unos estadistas hablando en una habitación que no está del todo cerrada. Me acerco un poco para escuchar lo que dicen.

—Falta información sobre la CPT. Desapareció de la nada el día lunes, Señor.— Abrí mis ojos, impresionada. Descubrieron la falta de información, lo que me parece extraño es que desapareció desde el lunes. Yo robé información el martes en la tarde.

—Toma esto. Sal y llévaselo a Verónica, ella lo guardará mejor. Es lo único que queda.— Después de eso, la puerta empezó a abrirse más y corrí hasta entrar en un almacén de ese mismo pasillo. Dejé la puerta entreabierta para ver qué tenían en la mano. Un estadista cercano al líder llevaba una carpeta gris en su mano. Iba solo.

Quizás la carpeta nos pueda servir, si es información de la CPT. Se lo tengo que quitar.

Reviso el almacén para conseguir algo que me ayude y vi un pequeño artefacto que usan los protectores, da electricidad. Perfecto.

Salí cuando el estadista estuvo de espaldas, lo seguí con cuidado y al estar casi a su lado, le acerqué el artefacto y lo encendí. No contaba con que haría mucho ruido, pero si hizo muchísimo ruido. La puerta de la que había salido el estadista se abrió y empezaron a salir personas. Entre ellas, el líder. Tomé la carpeta del piso y corrí. Todos me seguían, por distracción tropecé y llegué rapido al final de las escaleras, porque rodé lo que faltaba de ellas. Me levanté como pude y corrí un poco más lento por el golpe hasta llegar a la ventana del primer piso. Ahí asomé mi cabeza y vi a Tony esperando, le susurré "rápido" y tan pronto estuve con el dije—Me descubrieron.

"Tony Acosta"

La luz a través de mi ventana parpadeó en código morse, Nyxen lo había logrado.

Tomé mi bolso y con cuidado la gran escalera que tenía en una habitación sin muchas cosas que me servía de almacén. Salí de casa, caminé hasta el área estadista y esperé a que Irene se asomara. Llevaba 13 minutos esperando y no salía. Me preocupa que no lo logre.

Esperé un rato más y al fin salió, tenía una carpeta en su mano y parecía agitada. Su cabello estaba hecho un desastre y ella no estaba así el domingo, no daba la impresión de no ser de las que se peinaba. Algo anda mal.

—Rápido. —susurró y yo coloqué la escalera para que ella bajara.

Estando abajo me dijo lo que me temía—Me descubrieron.

Luces viniendo de linternas estaban en las ventanas, tomé a Irene de su brazo libre y empecé a correr en dirección a la salida oeste. No había nadie en las calles, pero sabíamos perfectamente que atrás habían estadistas buscándonos.

Teníamos que llegar a donde estaba Cassiel.

"Cassiel Anderson"

Salí de mi área apenas las luces delataron a Nyxen. Traje conmigo dos bolsos con armas, estoy dispuesto a enseñarles a todos como usarlas.

La salida oeste cuenta con dos protectores no tan buenos. Aquí la seguridad nunca a sido del todo buena. Librarme de ellos será fácil, si no me ven. Tomé cables sueltos que estaban cerca. Y en silencio amarré al primero, que se encontraba sentado comiendo mangos. El muy idiota se ahogó con el.

Escuché un ruido fuerte que venía del lado sur. Lo ignoré.

Luego caminé hasta llegar atrás del otro protector, coloqué un cuchillo en su cuello sin intención de usarlo y dije: —siéntate con el otro, sin hacer ruido.

Hizo exactamente lo que le dije y cuando estuvo sentado lo amarré al igual que el del mango. Cubrí ojos para que no vieran a los otros y boca para que mantuvieran silencio.

Luego de un rato, vi a Tony con Irene, parecían agotados de correr, al llegar hasta mi, Tony me dijo—Escóndete.

"Enora Anderson"

Ella y yo salimos fácilmente de nuestra área. Corrimos hasta llegar al sur, donde estaba Miranda esperándonos.

Al llegar, notamos que habían cajas de diferentes comidas cerca de la entrada. Entonces salió Miranda con solo un bolso—Preparé dos más, pero están dentro. Vengan conmigo.

—No hay nadie, ¿cierto? —pregunté mientras entrábamos—No.

Caminamos hasta llegar cerca de la comida y nos enseño dos bolsos ocultos entre las cajas. Los tomamos y luego de eso escuchamos a dos personas acercarse.—abajo.—nos susurró Ella y quedamos las tres escondidas entre esas cajas. Encendieron las luces.—Bien, Contemos de nuevo, ya que no estás seguro de que están todas las cajas.—Rieron y empezaron a contar una por una. Ella, Miranda y yo nos movimos al lado contrario por el que suponíamos que pasaban. Pero por ese lado solo pasaba la chica. Nos topamos con el muchacho contando del otro lado y este le dijo inmediatamente a su compañera.— las tres, vengan conmigo.

Teníamos que salir de aquí lo antes posible. Noté un cuarto abierto lleno de vidrios. ¿Por qué habría vidrios en el área de labrador?

Mire a las chicas y Ella dijo: entren y hagan ruido con los vidrios, yo los distraigo. Las veo en la salida.

Después de eso, empezó a correr.

"Miranda Bennett"

Ella corrió y los dos muchachos que estaban con nosotras la empezaron a seguir, olvidándose de nosotras por completo. Nora y yo entramos al cuarto de vidrios y antes de pensarlo mejor, rompimos todos al mismo tiempo, haciendo un ruido terrible que devolvió a los muchachos. Nos escondimos tras la puerta cuando llegaron, al poco tiempo, Un ruido muchísimo peor que el vidrio se escuchó afuera del área, los que nos buscaban salieron y tras de ellos nosotras también. Corrimos por el lado contrario de ellos y salimos por el frente. Luego de eso, todos en el área de labrador estaban despiertos y miraban por las ventanas.

Corrimos lo más rápido que pudimos hasta llegar a la salida oeste, donde deberían estar los demás, pero no estaban. Escuchamos a personas adultas acercarse y nos escondimos tras un muro de ladrillos. Al poco tiempo de que las personas se fueran, nos dijeron—Trepen las rejas.

"Helena Sanz"

Mi plan era correr para distraer a esos dos intrusos y que las chicas hicieran ruido. Ellos se devolverían con ellas y me daría tiempo de hacer una distracción mucho mayor y poder escapar las tres. Como dije, las chicas hicieron el ruido con los vidrios y yo tomé la bomba que le robé a papá antes de irme para activarla. No era una bomba que hiciera mucho daño, así que la activé y la lancé hacia la parte menos habitada del área de labrador. Luego corrí a la salida oeste y escuché como personas se acercaban al lugar de la explosión. Antes de llegar, decidí que no teníamos que darle una señal a Nyxen. Yo misma lo iré a buscar.

Al llegar al centro, subí el edificio del faro y me encontré con el que buscaba—Vámonos. Cambio de planes.

"Nyxen Mora"

Ya estaba aburrido de esperar en el faro, hasta que escuché una explosión en el lado sur, donde estarían las chicas.

Comienzo a preocuparme por todos pero no quiero arruinar el plan de Ella, así que me quedo aquí. Al poco tiempo, Ella me sorprende diciendome que hubo un cambio de planes, bajamos las escaleras del lugar y luego corrimos hasta la salida oeste. Donde los chicos no estaban—¿Dónde se metieron? —se preguntó Ella.

Luego noté que estaban fuera de la RELD. Escondidos—Mira ahí, afuera.

—¡Por aquí, corran!

Trepamos las rejas para llegar al otro lado, estaban todos.— Tengo las piernas entumecidas de estar tras el muro.

—Hace rato que saliste de ahí, Enora, no duraste ni 5 minutos.

—Déjame en paz, Cass.

Y todos juntos nos alejamos de nuestro hogar.

ENDEST (libro 1)- Ari AmadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora