Isolation

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Kunikida Doppo llegó a la casa que le pertenecía ahora al joven Nakahara. Tocó el timbre esperando que abriera la puerta, sin embargo, nadie salió.

- Joven, ¿busca el chico guapo? - dijo una anciana que estaba sentada en una silla mecedora.

Cuando Dazai y Chuuya se hicieron novios decidieron vivir en una casa donde haya gente al rededor, a Dazai no le pareció pero Chuuya insistió, con el tiempo el pelirrojo fue llevándose el cariño de todos su vecinos, en especial de esa anciana.

- Supongo que sí, vengo a recoger las cosas del joven Dazai. - dijo el rubio acomodandose los lentes.

- Sí, ya sé que viene a recoger las cosas de ese desperdicio de vendas. - el rubio río ante lo dicho de la anciana, ese apodo si le quedaba muy bien al cantante castaño -. Tal vez el joven encantador ande durmiendo, ayer estaba muy decaído y resfriado que le regale una taza de té con miel. - dijo la ancianita.

- En ese caso lo buscaré más tarde. - dijo Kunikida pero en ese momento escucho la puerta abrirse.

Al subir su mirada vio a un chico que ciertamente era atractivo, pero tenía ojeras, ojos hinchados, ropa demasiado grande y sus pelos rojizos estaban desordenados.

Dazai la jodio por completo.

El chico solo le dio una inspección, luego saludo a la anciana con una sonrisa calida y sacó unas maletas con ropa.

- Perdón por no abrir, estaba bajando las maletas..- dijo frotando su ojo mientras soltaba un bostezo, se notaba que no había dormido.

- Ah, no se preocupe joven Nakahara. - hablo el rubio para mirar las maletas -. ¿Esas maletas? - dijo con curiosidad.

- Son las cosas de Dazai. - dijo con la voz un poco quebrada al mencionar su nombre.

Kunikida solo asintió y agarro sus cosas para luego marcharse despidiendose de la anciana y de Nakahara.

No sabía en sí que había pasado entre el castaño y el pelirrojo pero estaba seguro que el que tuvo más culpa en todo era Dazai.

Cuando Chuuya cerro la puerta lo único que hizo fue ver la casa y sentir un vacío, bien, Dazai le regaló la casa, así que podía hacer cualquier cosa con ella, y eso era...¡venderla!

Pero lo haría después, cuando pudiera superar esta ruptura, así que como si fuera un niño en busca de una familia llamo a Akutagawa para decirle que se quedaría a vivir con él y su novio, Atsushi.

Akutagawa obviamente dijo que no, que era mayor y tenía que hacer su vida con su novio, puro "bla bla bla" que Chuuya no puso atención.

Así que una vez que hizo eso se fue directo a la casa de Akutagawa.

Al llegar empezó a hablar con Atsushi en cada momento mientras Akutagawa se encargaba de lavar los trastes.

- En serio siento mucho su ruptura. - dijo Atsushi con la mirada decaída -. No pensé que Dazai era ese tipo de persona...

- Atsushi, no quiero que odies a Da-...Dazai por esto, es tu amigo a fin de cuentas y sé que también fue como un hermano mayor para ti así como yo fui el de Ryuu. - hablo Chuuya dándole una sonrisa calida y moviendo los cabellos del albino de una forma muy juguetona.

Luego de eso Akutagawa sé acercó a ellos y empezaron a hablar de cosas triviales, obviamente que en un momento hablaron sobre lo que pasó exactamente con Dazai y al escuchar como fue la reacción del castaño solo porque Chuuya quería arreglar las cosas sintieron una gran decepción por el de ojos avellana.

Chuuya sabía que tampoco era la culpa de Dazai, tal vez al castaño también le había afectado mucho todo esto y tal vez Chuuya reaccionó también mal, igual nunca se espera nada bueno en una discusión de parejas.

Songs that talk about you - SKKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora