Songs that talk about you - SKK

Stop drinking

Estaba junto a Rampo, Yosano y Kunikida mirando una película muy aburrida que solo aceptó mirar por capricho de Rampo.

En ese momento un celular empezó a sonar haciendo que Rampo se estrese.

— ¡¿Ah quién le está sonando su celular?! - gritó, poniendo pausa a la película.

Todos empezaron a revisar sus bolsillos para ver si era uno de ellos, y bingo, era el castaño, Rampo lo miro con mala cara y el otro solo le sonrió haciendo señas para que continue la película mientras este atendía la llamada.

Cuando se fue a otra habitación para atender la llamada se sorprendió al ver que la persona que lo estaba llamando era Chuuya, haciendo que su corazón lata rápidamente y sus manos suden por responder la llamada.

«Hola»

«I...Idiota, ¿por qué..tú..me dejaste? »

Dazai no respondió al darse cuenta que el pelirrojo andaba ebrio, debería acudir a ayudarlo ya que a fin de cuentas el pelirrojo corría riesgo y más al ser famoso.

«¿Donde estas?»

No recibió respuesta, algo que hizo frustrar a Dazai.

Apagó su celular y rápidamente fue donde estaban sus cosas para agarrarlas, sus amigos lo miraron raro pero al ver que el castaño tenía prisa no les quedaba otra que guardarse el interrogatorio para más tarde.

Dazai salió de la casa y subió a su carro, no sabía exactamente donde encontrar a Nakahara, pero tal vez podría estar en uno de los bares cerca del lugar donde fue dado el concierto.

Mientras manejaba se dirigió a un bar que era muy poco popular, sabia que muchos famosos entraban ahí para ahogar sus penas, no sería raro no ver a Chuuya ahí.

Bajo del carro y entró a toda prisa sin hacer caso al mánager que estaba ahí.

Busco entre todos a Chuuya y ahí estaba, sentado y con el teléfono aún pegado en el oído como si el castaño jamás hubiera colgado.

¿Donde mierda estaban los amigos de Chuuya cuando este se encontraba en tal estado?

Fue uno de los pensamientos que corrió por su cabeza al ver tan vulnerable al de ojos azules.

Se acercó a él para sentarse a su lado y luego a obligarlo sea como sea a irse.

— Chuuya..

El mencionado levanto la mirada y al ver al castaño le dio una sonrisa para ir a abrazarlo con pasos torpes.

— ¡Dazai! ¡No me dejaste!

El castaño no tenía tiempo para escuchar esas cosas así que tomó de la mano a Chuuya y lo arrastró hasta afuera, sin embargo el pelirrojo lo detuvo.

— ¡Oye! Albatros esta en el baño..

Entonces sus amigos si estaban ahí, pero igual no dejaría que Chuuya se quede hasta más tarde, lo jalo de nuevo para subirlo al carro.

— ¡Esto es un secuestro!

Grito Chuuya haciendo que todos lo miren, el castaño solo sonrió y dijo que estaba ebrio.