Anubis

Noche de paz...

Los pedidos no paraban de llover, y en la pequeña tienda salían paquetes repletos de juguetes para niños. A horas de navidad, un montón de padres, que parece que tienen una distorsión del tiempo y la realidad, compran a último minuto los regalos que faltan. La gente se amontonaba como moscas a la miel y el pequeño ventilador de techo, no podía apaciguar el calor que emanaban. A pesar de lo tedioso que parece, esta época es buena para este tipo de tiendas, ya que las ventas se incrementan hasta un 300%.

Pleno mediodía, con el calor y la humedad del verano, la señora Martha, la madre de Isaac y Azul, envolvía un regalo tras otro. Ella y sus dos hijos eran dueños de la juguetería llamada "Mi dulce abejita"; que, aunque fuera pequeña, era el sustento de toda la familia. Isaac, era el que hacia los repartos de los pedidos online; en cambio su hermanita, se quedaba en la tienda a ayudar a su madre. Como decía, desde la mañana que salen los pedidos de juguetes de todo tipo, peluches, cocinitas, pelotas de futbol, autitos, juegos didácticos como rompecabezas, etc. Mientras tanto, Isaac repleto de paquetes, tomaba su bicicleta blanca y salía de la tienda, llegaba al punto de encuentro y esperaba. A la hora, hora y media, volvía y el circulo se repetía.

El día pasó rápido, y llegado las 20:00 horas,la señora Martha cierra su tienda para irse a la casa. Isaac, todavía no habíallegado de hacer su última entrega, así que iban a encontrarse directo en lacasa. Volvía con su bicicleta a toda velocidad, con la felicidad de haber hechoun buen trabajo. El cuervo había despertado de su sueño y de a poco cubría consus oscuras alas el firmamento nocturno. Las luces parpadeantes iluminaban elcamino de nuestro protagonista. El fresco de la noche compensaba elinsoportable calor del día. Llegando al fin, 100 metros le faltaban cuando vecomo su mundo es sepultado por un alud de desgracias. En una esquina de lacalle "Sinclair", su madre y hermana iban caminando, sin percatar que dossujetos en una moto se acercan a toda velocidad. Uno se baja de la moto, con armade fuego en mano y empieza a forcejear con la señora para tratar de sacarle labolsa de los mandados que tenía en ese momento. Ella se resiste y tambiénforcejea. Al mismo tiempo, Azul se asusta y corre en dirección a la calle. Ycomo burla del destino, hace aparecer un auto gris a toda velocidad que laenviste de forma bestial y desapareciendo como acto de magia. Y para echarlesal a la herida, al sujeto se le escapa un disparo que le atraviesa el pecho ala señora Martha. El malviviente se sube enseguida a la moto y ambos huyen dela escena del crimen. En un instante, Isaac ya estaba al lado del cuerpoagonizante de su madre, viendo con horror como exhalaba su último aliento llenode sangre. A unos metros, su hermana se encuentra tirada, inconsciente, apenaspudiendo respirar. Se acerca a ella y trata por todos los medios de que vuelvaen sí. Está completamente en shock, a tal punto que no puede emitir sonido.Algunos vecinos, al escuchar el disparo, salen y los asisten. A los minutosllega la ambulancia y las trasladan hasta el hospital, mientras que una vecina,"doña pupe", lo alcanza a Isaac en su viejo auto. Llegan al hospital y seencuentran con que Azul ya había sido ingresada al quirófano. Lo que parecíauna noche tranquila se convirtió en un martirio.