Tomemos, nuestro, tiempo.

20

Comenzamos la pelea, para saber quien ganara la guerra, pero nunca predije, cuando dolería el final de esa meta.

Por que nunca hubo ganador...

Sustos que no dan gusto....

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Es simplemente perfecto, o eso creía Shinichiro, su adorable y consentido hermanito Mikey y su lindo y apreciado cuñadito Takemichi planeaban celebrar un Halloween emocionante, después de la pelea contra Valhalla y ver que Baji estaba bien, decidieron que celebrarían bien la festividad del día de espantos.

Que mejor forma que realizando una fiesta de disfraces con sus más allegados, al menos con los más conocidos y claro en la casa de alguna víctima, Shinichiro tuvo que esforzarse a convencer a su abuelo para que aceptara en su casa a un montón de jóvenes adolescentes, sin embargo, este se negó, afirmando que no estaba para ser interrumpido en su noche de sueños por mucho escándalo.

Entonces Mikey tuvo la idea de que fuera en casa de la única persona que no tendría tanto problema, la casa de su adorado y querido novio.

Shinichiro tubo que mantener la paciencia para poder, poder convencer ahora a su hermano menor que no era buena idea, pero con lo influyente que es Takemichi dijo que estaba bien, si, tenia que suponer que Mikey convencería a Takemichi.

Y no solo el, todos parecían emocionados con la idea de festejar, para ellos se organizaron dispuestos a cooperar.

Shinichiro como el hombre responsable, fue quien confirmo que estaría con ellos y de paso invitaría a sus amigos, que podría salir mal...

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¡Todos!...¡Absolutamente todo esta mal!.

Hace un buen rato, el junto a Mikey, Emma e Izana, llegaron a la casa del chico de ojos azules, para encontrar el lugar un tanto decorado con temática con cosas de Halloween, Takemichi había sido ayudado por el chico Chifuyu, y sus otros cuatro amigos.

Shinichiro parecía sentirse como un padre orgulloso y emocionado por ver una fiesta de amiguitos de sus hermanitos... como pasaba el tiempo, hace tiempo aun a pesar de las cosas que sucedieron, momentos como estos, le hacen ver que cada cosa que hizo valió la pena, son sus lindos hermanitos, adolescentes, pero son sus hermanos, es muy poco creíble que ya son chicos que viven su vida al máximo y tal como debe de ser.

Claro dos de ellos son delincuentes pandilleros, y una es una chica con cosas de chica pero que se mantiene en el estándar de lo que una chica de su edad le gusta, además de estar en la etapa de enamorados.

¡Mira nada más a Mikey!, el menos esperado, tiene pareja y es un chico, que sin duda se gana el corazón de cualquiera, no hay duda que ese par son el uno para el otro, Mikey lo adora y el ojiazul de la misma forma, no puede pensar no verlos en el futuro separados.

En fin, si se puso sentimental verlos reunidos, como Mikey ayuda a los demás acomodar todo para tener mas espacio en la sala, moviendo sillones, que, Wou... perece fuerte, ¿Cuan fuerte puede ser Mikey?, el chico movió solo un sillón tamaño familiar, y sin mucho esfuerzo.

Los otros debieron pensar lo mismo, por que se quedaron parados viendo que Mikey ya había movido al menos dos y ellos apenas podían con uno, pero tal vez creían que así era Mikey.

Por otra parte, Izana y Emma ayudaban a Takemichi a preparaban todo para la comida de esta noche, al menos un poco botana.

No mucho rato después, todo estaba listo. Y estaban desdiciendo que era mejor disfrazarse.