Si había algo que adoraba de Londres, eran sus espectaculares días lluviosos. La tormenta parecía ser una fiel compañera que conocía perfectamente su actual estado de ánimo. La vida parecía decirle a gritos a Eren que jamás iba a ser feliz. Con ciertas señales le indicaba que dejara de buscar a una persona con la cual compartir su vida pues nadie había nacido para permanecer a su lado y quizás, solo quizás eso era lo mejor.
- Me cuesta creer que ese mocoso insolente haya cancelado la boda – Eren escuchó a lo lejos la voz de su mejor amigo Jean Kirstein– pero lo que es verdaderamente estúpido, si me lo permites decir, es lo que hiciste tú querido amigo.
- Déjalo ya Jean – susurró Eren sin dejar de observar por la ventana. Era más entretenido ver las gotas caer que discutir las decisiones que había tomado con él.
- No puedo pasar por alto que mi mejor amigo pagó la deuda de esa familia, y que encima se comprometió a mantenerlos hasta que el mocoso y la niña se casen ¿En qué estabas pensando Eren? Sé que tienes una fortuna incalculable y que puedes, sin problema alguno, sustentar los gastos de esa familia pero, ¿Después de lo que te hicieron, crees que se lo merecen?
- Deja de llamarlo mocoso – pidió Eren amablemente – Levi no quería casarse conmigo ¿Qué querías que hiciera? ¿que lo obligara? Sabes que yo jamás haría algo así.
- Tenías total derecho a exigirlo – replicó su amigo – has gastado una fortuna pagando sus deudas, y serán tus mantenidos por un buen tiempo, lo mínimo que pueden hacer por ti es entregarte a ese mocoso... digo a ese joven rebelde.
- Levi es el chico más hermoso que he visto en la vida, lo vi un par de veces en el pasado cuando era más joven, y aunque era bellísimo sin duda ha crecido siendo un muchacho muy apuesto, pero vi la preocupación y la desesperación en sus hermosos ojos – Eren suspiró antes de continuar – no podía forzarlo a hacer algo que no deseaba, no podía condenar su felicidad y su vida a pasarla a mi lado, iba a odiarme mucho más de lo que seguramente ya lo hace.
- Pues él se lo pierde Eren, si no aceptó casarse contigo tú no tenías por qué pagar nada, mucho menos sin obtener algo de vuelta – se quejó Jean.
- No puedo dejarlo a su suerte, ni a él ni a su familia, además...
- Ya lo sé, ya lo sé, te sobra el dinero y no tienes a nadie con quién compartirlo – se adelantó Jean – la cuestión es ¿Por qué Levi Ackerman? Hace años también ibas a casarte con un lindo chico, igual él te rechazó y no hiciste nada.
- Andrew no tenía los mismos problemas económicos que Levi, el inconveniente con él fue que estaba enamorado de otro hombre y no podía intervenir en esa relación – aclaró Eren.
- Relación que sus padres no aprobaban, por cierto – puntualizó su amigo.
- Si lo obligaba a casarse conmigo iba a ser un hombre muy infeliz, y yo no quería no iba a ser el responsable de su amargura.
- ¿Y sabes por qué el mocoso engreído no quiso casarse contigo? ¿Ya tiene algún enamorado también? –
El semblante de Eren se ensombreció. Él había esperado que el joven solo fuera rebelde y testarudo. Eren tenía la esperanza de que Levi sintiera que aún era muy joven para contraer matrimonio y deseaba con todo su corazón que así fuera pues eso le daría la oportunidad de cortejarlo y eventualmente enamorarlo poco a poco, pero la madre de éste, rompió su ilusión diciéndole que su hijo tenía un absurdo enamoramiento por un joven de clase baja que limpiaba establos. Y Eren, sencillamente no podía luchar contra eso, si Levi ya había entregado su corazón a alguien más, no tenía ni la más mínima oportunidad de conquistarlo.
- Eso parece – respondió Eren después de soltar un suspiro.
- ¿No estás seguro o por qué lo dices? – preguntó Jean confundido.
ESTÁS LEYENDO
Amor Forzado - Ereri
FanfictionLos planes de Kuchel Ackerman eran casar a su segundo hijo con Eren Jaeger, un magnate del acero originario de Manchester que era tan bueno como acaudalado. Pero no contaba con que su hijo Levi iba a rechazar al millonario más cotizado de Londres, y...