Los planes de Kuchel Ackerman eran casar a su segundo hijo con Eren Jaeger, un magnate del acero originario de Manchester que era tan bueno como acaudalado. Pero no contaba con que su hijo Levi iba a rechazar al millonario más cotizado de Londres, y...
Esa noche durmieron en la casa de Zeke y su familia sorprendiendo a los esposos cuando al llegar la noche anunciaron que dormirían juntos. Pieck educada bajo el seno de una familia aristócrata alemana con fuertes influencias extranjeras no se incomodó por ello, Zeke por su parte, estaba un poco sorprendido de que su cabal hermano rompiera los protocolos de la estricta sociedad londinense de dormir con su pareja antes del matrimonio. Pero ninguno hizo comentario alguno. Eren y Levi sabían como llevar su relación al fin de cuentas.
Antes de irse a la cama, Levi pasó gran parte de la tarde charlando con Pieck y el pequeño Falco. Era agradable el poder convivir de esa forma con la familia de Eren que se mostraba encantada de poder conocerlo al fin. En esa conversación se dio cuenta de que realmente su futuro marido los tenía al tanto de su vida como si en verdad ellos llevasen mucho tiempo juntos, y lejos de sentirse molesto o incómodo, una sensación de pertenencia se alojó en su corazón.
Incluso Falco le había preguntado de la ocasión en la que se había caído de un caballo y Levi encantado le contó la fatídica anécdota que aunque ya había platicado con anterioridad, en aquella ocasión la sintió diferente pues ya era consciente de que Eren le había enviado chocolates y girasoles. El mayor siempre tenía detalles para con él que lo hacían caer más rendido a sus pies.
Durante el tiempo que Levi pasó con la cuñada de Eren y con Falco, su prometido se había encerrado junto con su hermano en el despacho de éste con la excusa de solicitar la preparación de la cabaña en la que al día siguiente contraerían nupcias. Aunque Levi imaginó que Eren tendría más cosas que hablar con su hermano después de varios meses sin verse.
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- Todo esto es muy repentino Eren, y tú no eres así – comentó Zeke para después darle un sorbo a su copa de vino – pero también sé que no actúas por impulso y que tienes una muy buena razón para proceder de esta manera.
Eren asintió sonriendo pues estaba feliz de que su hermano lo conociera tan bien a pesar de solo verse un par de meses al año. Zeke y él siempre habían sido muy unidos, y sus personalidades eran bastante parecidas, quizás la única diferencia entre ellos además de edad, los rasgos físicos y sus preferencias sexuales, radicaba en que el mayor era un poco menos confianzudo y benévolo con las personas.
El menor de los hermanos le habló acerca de todo lo que había pasado entre él y Levi. Y aunque no quería, tuvo que relatarle la terrible situación que su prometido había atravesado por culpa de Farlan, pues gran parte de la ayuda que necesitaba radicaba en que conociera esa parte de la historia. Sin embargo, Eren sabía que Zeke sería discreto.
- Imagino todo lo que ha sufrido Levi a causa de ese infeliz – comentó Zeke lleno de ira – ese imbécil debe pagar lo que le ha hecho ¿Cómo es que tiene la valentía de volver a "reclamar" a Levi después de lo que le hizo? – el mayor de los Jaeger no daba crédito al descaro de ese tal Farlan - Jean te está asesorando, ¿Cierto?
- Completamente – respondió Eren – él incluso se quedó en mi casa ya que la madre de Levi amenazó con ir pasado mañana por él.
- Desgraciadamente, personas como la madre de Levi abundan – comentó Zeke – pero nosotros nos encargaremos de que no lo vuelvan a hacer sufrir.
