Prólogo

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Louis baja de su carro azotando la puerta con demasiada fuerza qué por poco y quiebra las ventanas del carro.

El dolor de cabeza es insoportable pero no sé queja por eso ya que la fiesta que organizó su amigo Liam valió la pena.

Revuelve su cabello está darle un poco de forma,entra a la tienda y toma un carrito para hacer su despensa para poder tener alimentos en su casa.

Se va directamente al pasillo de las carnes frías y en ése momento no le interesan que los productos tengan bacterias lo importante es que tiene que llevar comida sino morirá de hambre.

Llega al área de frutas y verduras ahí se encuentra una gran variedad de productos,hace una mueca sin saber que escojer.

A lo lejos escucha un tarareo hermoso pero le resta importancia,deja el carrito cerca de las manzanas y ve una canastilla de fresas jugosas.

Extiende su mano para tomar el producto pero alguien choca contra su cuerpo,se gira para soltar una maldición pero se queda petrificado.

Abre la boca al ver a un adolescentes con una hermosa faldita negra y una hermosa camisa blanca,una chaqueta de jean hace que se vea demasiado apetecible.Nota que en su oídos tiene unos audífonos,se los retira y reconoce la melodía de Lana del Rey.

-Oh,lo siento mucho qué torpe soy.-Louis sonríe al escuchar la voz aguda pero ronca del chico.-Solo vine por las últimas fresas,¿Qué loco,no lo creés?.-

Aquél adolescente sale de su vista y Louis jadea en cuestión de segundos,frota sus manos en su pantalón y toma su carrito.

Sigue los pasos del más jóven y admira sus deliciosos muslos gordos que son como un manjar,se imagina follandolos,como serían los sonidos de sus gemidos mientras le pide que le dé más duro.

Una erección nace y solo trata de que no sé note,muerde sus labios para poder calmarse una poco pero le es imposible porqué ve como la pequeña curvatura de la espalda del menor es demasiado fina.

Una vocecita le indica que se lleve al jóven,que lo haga su esclavo para que nadie lo vea.Porque no quiere compartir ese manjar traído desde el cielo.

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