Segunda temporada de Bad Reputation: La nueva vida de Lauren y Camila. ¿Seguirán juntas a pesar de las adversidades o su historia está destinada a llegar a su fin?
-Mamá ¿cuando va a regresar mami? -preguntó mi hija en cuanto aparecí por ella en casa de los Jauregui
-No lo sé amor, pronto...
-¿Cuándo regrese podemos hacer otro picnic?
Esa pregunta me sacó de mis pensamientos y entonces todo volvió como agua fría a mi, el divorcio, esta semana me llegaría la demanda para firmarla y entonces todo habría terminado, me sentí morir en ese momento, y me culpe por haber sido tan imbécil, por haber engañado a Lauren.
Llegamos a casa y mi hija fue a tomar una siesta, yo me quedé en la sala pensando, sin saber qué hacer, me sentía sin rumbo, solo quería desaparecer, me sentía tan sola.
Me puse a pensar en todas las veces en que Lauren me acompañó, estuvo ahí y me dio su amor incondicional, y yo no supe hacer otra cosa que traicionarla.
Flashback
Estábamos en la escuela, en una fiesta organizada por la misma, así que era la cosa más aburrida del mundo, con maestros por aquí y por allá vigilando como perros guardianes. ¡Dios esto estaba aburrido de verdad!
Mis amigas charlaban con algunos chicos, la idea era salir de ahí e ir a cualquier lugar que no fuera una guardería, me preguntaba si Lauren iría. Ella estaba como siempre solitaria y observando todo, se veía como la más aburrida de todas. Entonces salió del gimnasio y yo por mera curiosidad la seguí.
Al llegar afuera la vi encendiendo un cigarro y a punto de subir a su auto.
-¿Te vas? -pregunté acercándome a ella, ella se giró y me miró con esos ojos perfectos esmeralda
-Esto es bastante aburrido...
-Lo sé
-¿Quieres un aventón?
-Claro, igual no quiero estar aquí...
Me subí a su auto y ella comenzó a conducir, pero no iba hacia mi casa, sino al lado contrario
-¿Qué haces? -le pregunté al ver una sonrisa pícara en su cara
-Hagamos que valga la pena, ya estamos aquí -fue lo único que me respondió
Llegamos a la playa y nos fuimos hacia el lado de las motos acuáticas corríamos pero al mismo tiempo ella me hacía cerrar la boca
-Ven aquí, sube...
-Lauren, esto es ilegal
-Es ilegal estar en esa fiesta tan aburrida en una noche tan perfecta Camila, solo vamos a dar un paseo
De alguna manera Lauren siempre me convencía de hacer cualquier tipo de locura, no podría resistirme a esa sonrisa que hacía que sus ojos se pusieran pequeños, y ahí estábamos, tomando una moto sin permiso, arrancó la misma a toda velocidad y nos adentramos al mar. Al principio sentí miedo, la oscuridad de la noche era bastante aterradora, aunque la luz de la luna hacia todo bastante hermoso.
Detuvo la moto lo suficientemente lejos del muelle, pero no tanto para perdernos, como pudo volteó hacia mí para quedar mirándonos de frente en el pequeño espacio del asiento.
-Es una noche hermosa... -dije nerviosa de estar tan cerca, entre las dos habían pasado cosas pero, con Lauren nunca era claro
-Tú eres hermosa, más que la inmensidad del mar, o la luz de la luna -respondió Lauren dándome un beso apasionado, tomando mi cabello con fuerza y bajando hasta mi cuello y cerca de mis pechos
-Lauren...
-Te deseo tanto Camila, que si no estuviéramos en medio del mar en este espacio tan pequeño te haría mía... -me sonrojé violentamente y sentí mi cara arder, la verdad yo también lo deseaba, terminó dándome un pico me abrazó contra su pecho.
Nos quedamos mucho tiempo ahí, hablando de cosas muy profundas, jamás creí que estar en un lugar tan solo y oscuro me sentiría tan segura incluso de abrir mi corazón.
Le conté mis secretos, mis miedos, mis anhelos... Haber salido de esa fiesta para estar con ella me había dado una de las mejores noches de mi vida, y entonces comprendí que esa conexión, no se repite dos veces en la vida
Fin del flashback
Las lágrimas brotaron de mis ojos, fui una estúpida, encontré a mi alma gemela siendo joven y lo arruiné.
La ansiedad al caer la noche me estaba matando. Mi hija no paraba de hablar de Lauren y eso era aún peor. Cuando al fin se fue a dormir yo no pude hacerlo.
Di vueltas y vueltas pensando en que el abogado llamaría en cualquier momento para avisarme que debía firmar el divorcio, y no podía hacer nada, Lauren ni siquiera estaba en la ciudad.
Di vueltas sin parar en la cama pensando si estaría de viaje por trabajo, o con Shannon, quizás con Keana... No, no podía más, iba a averiguar en donde estaba y con quién...
Rápidamente entré en Instagram, busqué su perfil. Nada. No había nada, la última vez que ella había subido algo fue cuando la pequeña Pearl le hizo un dibujo en la oficina. Recuerdo ese día y recuerdo ese dibujo. Porque aquel día me fui con Matthew. Más culpa.
Dejé atrás mi dignidad y busqué en el Instagram de Keana. Nada. Ella no había subido nada en semanas, la última vez estuvo en un yate. También recuerdo eso. Al parecer estar buscando pistas solo me estaba generando más ansiedad de la que podía manejar.
Me armé de valor, mi última carta, y lo que no quisiera ver, el Instagram de Shannon, había fotos de los últimos días aquí en Miami en el evento de la fundación, fotos que claro, Lauren tomó. Pero eso era irrelevante. Había historias. No sabía si mirarlas. Tuve mucho miedo.
Bloqueé mi teléfono. Lo lancé por un lado, pero no podía estar tranquila. Nuevamente lo tomé, tragué saliva y lo desbloqueé, entre una vez más a su Instagram y con el corazón latiendo a mil por hora abrí sus historias...
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Y ahí estaba... Lauren estaba con Shannon en Barcelona... En ese momento mi corazón dejó de latir a toda velocidad, simplemente se rompió...
