POSESIVOS (DRAMIONE) (PARTE 1)

MARGARITAS

Siguieron el beso, ambos luchaban por llevar el dominio, Draco sostenía a Hermione de la cintura, ella intercambiaba sus manos acariciando el cabello y la espalda del chico, sus lenguas parecían querer impregnarse la una con la otra, era un deseo contenido que habían anhelado liberar desde hace tiempo, Hermione tenía de nuevo aquella extraña sensación en su intimidad, la misma que sintió el día que se entregó a Draco, era como si se comenzará a inflamar y a humedecer, como si palpitára, eso había sido nuevo para ella en aquella ocasión, nunca alguien la había provocado así, jamás la besaron ni tocaron antes igual, ni siquiera Viktor Krum que fue su primer beso le causó alguna similitud. El Slytherin la hacía experimentar nuevos estímulos que eran inexplicables pero sumamente placenteros para ella, sentía su piel erizada, el muchacho bajó un poco su mano y apretó un glúteo de la castaña, acercándola más a su propio miembro, ella notó el pene erecto de Draco y al segundo lo apartó, tenían la respiración agitada y el corazón vuelto loco, ella desvío la mirada para evitar verlo y se acomodó el cabello, él rápidamente volvió a tomar las flores que yacían en el suelo detrás de la muchacha, la cual le extendió la mano para que se las entregara, él la miró y sonrió maliciosamente

-Dijiste que me las cambiarías- le recordó

-Si, pero dije que lo haría si me dabas un beso, yo fui quien te besó a ti- le guiñó un ojo

-Ya basta, deja de jugar-

-¿Qué hay de malo en que me las quede?, si no me las quieres dar, ¿Para qué las trajiste?-

-Yo... quería agradecerte por defenderme, pero las flores estaban de más, las traje en un impulso, es una ridiculez-

-A mi me han parecido un lindo detalle de tu parte- ella se ruborizó y miró a otro lado -Adoro ver ese color en tus mejillas- ella quería sonreír pero se mordió las mejillas por dentro de su boca para impedirlo, él se dió cuenta -¿Por qué eres tan reprimida?-

-¿Qué?-

-Querías reírte y te reprimes, querías seguirme besando y te reprimiste, para luego apartarme, ¿A que le temes, a lo que pueda llegar a pasar o a no poderte contener?- ella lo miró perpleja y dió media vuelta para retirarse -Ahí vas de nuevo- se paró rápido frente a ella impidiéndole el paso -¿Por qué evades lo que sientes?, no estás haciendo nada malo, no hay motivos para evitarlo, justo por eso quería ir a buscar a los idiotas de tus amigos, yo no tengo nada que perder- alzó un poco los hombros despreocupado

-Ya no quiero hablar de eso-

-Bien, hablemos de otra cosa entonces- quitó la nieve de una roca cercana y se sentó para luego dar unos golpecitos en ella invitando a la leona a sentarse, ella lo miró dudosa -Ya estamos aquí, ¿No?- dió una leve sonrisa, ella tomó asiento junto a él, el muchacho redujo las flores a modo que el tamaño fuera adecuado para colocarlas en el bolsillo superior de su abrigo, a un costado de su pecho, adornando su atuendo como si fuera a un baile de graduación, a la jóven le pareció gracioso y ambos rieron -Vamos a hacer algo, cada uno hará una pregunta y el otro va a contestar con sinceridad, sin prejuicios de nada, burlas o comentarios de ningún tipo, solo nos limitaremos a escuchar y responder, ¿Te parece?- ella dió una leve sonrisa -Bien, primero las damas- invitó

-Entonces comienza tú- ella rió, Draco alzó las cejas sonriendo y siguiendo la broma

-¿Con que esas tenemos?- ella sonrió -Solo por eso te tomaré la palabra- relajó su rostro para adoptar un semblante serio -¿Lo que dices aquí, es verdad?- mostró la nota, ella observó la nota y se quedó pensando un momento -Sé sincera- la chica miró a otro lado y asintió, el Slytherin sonrió, besó la nota y la guardó en su abrigo -Bien, es tu turno, te escucho- ella bajó la mirada observó sus propios pies, tenía varias cosas que preguntar pero no sabía que decir