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el omega se dedicó a consolar a su alfa cuando este terminó de explicarle todo, Dan le daba caricias en la espalda y parte de los hombros, como si estuviera dándole masajes relajantes, besos suaves y cariñosos eran depositados con amor en el rostro del menor, haciéndolo sentirse amado por su omega y dándose cuenta que el lenguaje de amor de Dan era el contacto físico

mientras que el suyo eran las palabras de afirmación, pero ambos coincidían en los actos de servicio y el tiempo de calidad, sabía que a su omega no se le daban tan bien las palabras y por eso mismo el contacto físico era lo que más resaltaba en Dan, esa era otra pequeña cosa que amaba de su omega



si hacía una lista de las razones por las que ama a Dan, no acabaría nunca



el mayor además de los mimos que le daba a su alfa, soltaba su aroma de tal manera que empezó a expandirse por toda la cocina, llegando a salir de esta y terminando en cada rincón de la casa, algo que Jaekyung disfrutó en demasía, amaba el aroma de su omega tanto como lo amaba a él

el alfa jamás se cansaría de ese aroma a gardenias con un toque a cerezas, le resultaba tan dulce, exquisito y adictivo que sin duda alguna Kim Dan era su nueva droga, estaba desarrollando una gran dependencia hacia él pero sabía que su corazón estaba a salvo en las amorosas y bonitas manos de su hyung

–te sientes mejor emperador? debes terminar tu desayuno~ —le sonrió como solo él sabía hacerlo, haciendo que inevitablemente su alfa también sonriera, contagiado por su actitud positiva— que tal si esta vez yo te consiento un poco? tú siempre haces eso por mi cuando me siento mal, es mi turno de hacerlo

con suavidad el omega empezó a acariciar las mejillas de su alfa, siempre siendo dulce y delicado como si estuviera sosteniendo una masa dulce, Jaekyung asintió dejándose hacer y permitiéndole a su omega consentirlo como él solía hacerlo cuando a Dan le venían los pequeños calambres y dolores durante el celo, o cuando algo malo pasaba, como la llegada de Heesung por ejemplo

pero en caso de los dolores del celo, el alfa siempre estaba preparado con los chocolates favoritos de Dan, frituras, snacks, sodas y diversas golosinas que eran del agrado de su omega, claro que también lo hacía tomarse medicamentos pero luego de eso era un completo festín para el pequeño omega consentido

–tomaré esa bonita sonrisa y ese rostro relajado como un sí —el alfa le respondió con una pequeña risa para luego darle un beso— alfa, ya~ si te dejo seguir no vas a acabarte tu desayuno

Dan empezó a darle de comer a su alfa como si este fuera un bebé, Jaekyung mentiría si dijera que no le estaba gustando ese trato, ahora sabía por qué Dan se ponía tan mimado durante el celo y lo entendía perfectamente, quién diría que el desalmado boxeador, el campeón nacional Joo Jaekyung estaba siendo mimado y consentido por su adorable omega? muchos no lo crearían hasta que lo vieran

–cuando terminemos de comer iremos al gimnasio, es importante que empieces con tus ejercicios temprano —el alfa solo asentía pues estaba muy ocupando masticando la comida que su omega le daba, podría acostumbrarse a eso fácilmente— las clases de Heesung son antes del almuerzo, verdad alfa?

–mh sí pero no te preocupes pequeño hámster, en dos meses ese desgraciado se irá a grabar su película de mierda —contestó el alfa cuando terminó de masticar— verás que esos meses pasarán tan rápido y luego se irá, no dejaré que vuelva a poner un pie en mi gimnasio después de eso, no lo quiero cerca de ti

Dan sonrió tranquilo, le encantaba ese toque de posesividad que su alfa tenía con él, pero saber que solo serían un par de meses los que tendría que ver a Heesung cuatro días a la semana, lo relajaba un poco y sinceramente a su lobo no le podía importar menos, desde que fijó sus ojos en Jaekyung no había pensado en otro alfa, ni siquiera en su destinado y finalmente Kim Dan estaba empezando a seguir los pasos de su lobo

𝙿𝚘𝚜𝚜𝚎𝚜𝚜𝚒𝚟𝚎︱𝙹𝙸𝙽𝚇 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora