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Rhaenya suspiró caminando hacia la carpa donde toda su familia se encontraba había pasado un tiempo en el bosque de los dioses tratando de alejarse de tantas personas y miradas ya que los rumores habían comenzado a correr por el reino sobre el cambio de sucesión por parte de Viserys Targaryen el cual no consideraba a Aegon ni por un segundo.
—princesa—dijo Myrenia caminando hacia la chica la cual le sonrió—su padre está aquí
—¿que?—preguntó Rhaenya borrando su sonrisa—¿que hace aquí?
—no lo sé, nadie sabe que hace aquí—dijo Myrenia
La platinada entró furiosa a la carpa viendo a su padre que bebía con Tyland Lannister mientras que su madre estaba con las demás mujeres mirando fijamente a su esposo tratando de no verse nerviosa ante la situación que estaba pero Rhaenya conocía muy bien a su madre y sabía que estaba incómoda más de lo que le gustaba demostrar.
Rhaenya camino hacia donde su padre estaba mirándolo furiosa más aún cuando un platinado con ojos azulados se acercó a su padre haciéndola suspirar frustrada al entender que era el primogénito bastardo de Aenar que había traído a Westeros para humillar aún más a su madre para el hombre no había sido suficiente golpearla todos esos años si no que ahora traía a su puto bastardo a la corte haciendo que el dragón que vivía en Rhaenya despertara.
—¿qué haces aquí?—le pregunto Rhaenya molesta a su padre ignorando la reverencia que Tyland Lannister le hizo antes te alejarse de la princesa—¿y quien es este puto imbécil?
—mi amada hija, el es tu hermano Jaerys—dijo Aenar tratando de tocar a su hija pero esta se alejó molesta—creí que era justo que gozara de esto, del apellido Targaryen y nuestras comodidades
—¿justo que este bastardo esté aquí? Su sola presencia es una humillación para mi madre—dijo Rhaenya mirando furiosa a su padre—¡es un puto bastardo!
—cuidado cómo hablas de él—dijo Aenar agarrando a su hija del brazo molesto—recuerda tu puto lugar Rhaenya y no es más allá que ser una yegua de hijos así que compórtate como tal
—no, tú recuerda el tuyo por que estás hablando con la Princesa de Dragonstone la cual tiene mucha más influencia que tú—dijo molesta Rhaenya para mirar a Jaerys que la miraba mientras sonreía—te debería dar vergüenza estar aquí y pavonearte como el primogénito de mi padre siendo que eres un hijo de una puta y no de una princesa Targaryen
—¿el hijo de una puta? No me hagas reír hermana, te recuerdo que soy el único hijo varón de nuestro padre por que la puta de tu madre no le ha dado ni un solo hijo—dijo Jaerys tratando de tocar a Rhaenya pero esta le golpeó la mano haciéndolo reír
—¿te crees especial por tener verga? Antes de tratar de puta a mi madre piensa en tu posición y en la de ella por que claramente es mucho más poderosa que tu aun siendo una mujer—dijo Rhaenya mirando con asco a su medio hermano—por que tú jamás dejarás de ser un puto bastardo que tiene que mendigar amor
