La Orden del Temple

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Hace unos días, Oscar, me había insinuado que los Templarios y otros grupos similares en la historia, habían formado parte de la búsqueda de la Semilla. Cómo desde niño sentí una particular atracción hacia los monjes guerreros, fantaseando con ser uno de ellos, la curiosidad sobre esta orden de caballería no dejaba de rondar en mi cabeza.

¿Quién no se ha sentido atrapado por la valentía y misticismo de los caballeros del Temple? Monjes que llegaron a dominar toda Europa y medio Oriente, ostentando más poder que todos los reyes contemporáneos y persiguiendo incansablemente, al escurridizo Grial.

De igual modo que me fascinaron por la personalidad y temperamento que irradiaban, lo hizo la forma que dio por finalizada su presencia... ¿Qué fue lo que sucedió con ellos realmente? ¿Es cómo cuenta la historia oficial o hay algo más? En lo que dura un parpadeo, desaparecieron del mundo y su orden fue disuelta por completo. Hasta la misma historia oficial tiene baches muy oscuros que nadie pudo explicar.

Un día lluvioso, aproveché un instante de ocio junto a Oscar y le pregunté sobre ellos, mientras observábamos la cuantiosa lluvia inundando el jardín interior. Entonces, él me respondió como si no le hubiera formulado pregunta alguna:

–¿Sabías que los Templarios se unieron a nosotros en la búsqueda del Chacha?

–Me lo dijiste hace uno días y por supuesto, nunca me lo hubiera imaginado. Contame más por favor.

–¿Qué sabes de la Orden del Temple?

–Guerreros feroces con los mismos votos que un monje cristiano luchando para recuperar tierra santa y luego para proteger a los peregrinos que allí se dirigían. Eso en sus comienzos, luego el grupo armado y político, más rico y organizado del mundo hasta ese momento conocido. Y después, la acusación por herejía y la persecución y ejecución por parte de la Iglesia y la inquisición. Terminando con la erradicación total de la orden.

–Muy buen resumen, ¿y qué sabes de Baphomet? –me preguntaba Oscar mientras dejaba que sus ojos se pierdan en la infinidad de las gotas cristalinas.

–Un ídolo con forma de cabeza barbada y cuernos. Fue usado como prueba de herejía por parte de la Inquisición hacia los caballeros de la orden. En teoría, primero fueron cristianos fervientes, monjes, y luego por alguna razón, renegaron de sus creencias y comenzaron a adorar a este nuevo ídolo "satánico".

–Eso fue lo que la iglesia y la inquisición dejaron escrito en los libros del juicio y luego para la historia. Claro que algo de verdad tiene, pero como siempre en la historia humana, hay muchas cosas que se escapan.

El famoso ídolo era el Chacha. Pero una simple cabeza de felino no es muy llamativa para que el pueblo los vea culpables. Había que inventar un fetiche con cuernos, un diablo, algo que de escalofríos y temor al cristiano de la edad media. ¿Qué hubiera sucedido si la verdad salía a la luz en ese momento? Imagínate que el Gran Maestre de la Orden, quién era el líder de los guerreros más admirados y venerados de su época, no solo por su valentía sin igual en el campo de batalla, sino también por su ética suprema, dijera que el verdadero salvador no es el que la iglesia pregona. Seguramente el catolicismo habría desaparecido o por lo menos, no sería lo que es hoy en día. La iglesia hubiera perdido todo el poder posiblemente, pero era un adversario digno de la Orden y dieron un golpe maestro.

–¿Cómo llegaron a conocer al Chacha?

–Tomaron contacto en medio oriente con uno de nuestros clanes durante las Cruzadas. Nosotros no éramos el enemigo y se sintieron a gusto en nuestra compañía. Era una tierra hostil y una buena comida y refugio no se rechazaban. El desierto es implacable. Luego, no pasó mucho tiempo para que se sintieran atraídos por los psicoactivos. Cuando comenzaron a usarlos, todo cambió para ellos. Dejaron de creer en la Iglesia y descubrieron su famoso Grial. Esta explosión mental los hizo evolucionar en todo sentido. Ahora si se sentían como verdaderos monjes guerreros, dispuestos a morir, no por lo que le habían contado, sino por lo que ellos mismos habían visto y sentido. Los Caballeros del Temple que conocemos hoy en día en los libros de historia, surgieron allí, sino hubieran sido simples soldados hambrientos de sangre y dinero como el resto de las milicias de esos tiempos.

–Pero si eran tan poderosos... ¿Cómo fueron aniquilados de un día para el otro?

–Durante mucho tiempo se creyeron intocables y realmente así lo fueron. Pero ningún imperio dura eternamente. El poder atrae envidia y esa envidia generó odio. Años de pactos y confabulaciones entre sus enemigos dieron su fruto y la condena de la Iglesia y su persecución hicieron el resto. Pero no desaparecieron totalmente, por supuesto. Siguieron nuestros pasos y pasaron en su mayoría a la clandestinidad. Muchos se unieron a nuestras filas y otros viajaron a América para comenzar nuevamente.

–¿Fueron a América? –dijo el muchacho frunciendo el ceño–. ¿De qué época estás hablando?

–Veo que escuchas con atención. Si, fue más de un siglo antes del supuesto descubrimiento de parte del genovés. Piensa que nuestro pueblo viene de allí, es obvio que sabíamos de su existencia y, por ende, la orden también. Por este motivo, la famosa partida de la flota templaria desde Francia, antes del famoso viernes 13 y que nunca fue encontrada, se dirigió al extremo sur del "nuevo" continente.

–¿Qué sucedió con ellos?

–Se aislaron y alejaron de toda humanidad que encontraron en su nuevo hogar. Así podían seguir su propia búsqueda sin ser molestados. Era la facción más orgullosa y obstinada de la logia. No quisieron mezclarse con ningún otro grupo por creerse los elegidos para traer al Renovador a nuestro mundo. Por eso partieron sin dejar rastros y se transformaron en fantasmas de la historia humana.

Pero... el mundo cada vez se hacía más pequeño.

Los siglos pasaron y la civilización comenzó su avance hacia esas tierras lejanas, obligando a la orden a migrar a tierras más inhóspitas destruyendo a su paso todo rastro para no ser encontrados. Su último bastión fue el extremo sur de la cordillera de los Andes. Cuando también los hombres comunes arribaron a sus inmediaciones, se deshicieron de todo y optaron por camuflarse entre los no iniciados. Como nosotros, un pueblo dentro de otro pueblo. Aunque no los veas, el Temple sigue estando en todos lados, aprendieron que el verdadero poder está tras bambalinas.

Libreta verde - Relatos de SebDonde viven las historias. Descúbrelo ahora