Libreta verde - Relatos de Seb

Duda

Caminando por el parque cerca de la mansión, mientras disfrutaba de un exquisito helado, pensaba cómo había ayudado entrar a la Otra Realidad en la búsqueda de la Semilla.

La idea dio vueltas en mi cabeza hasta que terminé el cucurucho y, sin respuesta, pegué la vuelta.

Una vez en la casa y luego de saludar a Marta, quien me devolvió el saludo con la misma expresión de una momia, fui a buscar a mi maestro para salir de mi duda.

Después de dar unas vueltas por la enorme casa en su búsqueda, lo sorprendí admirando un pájaro en el hermoso jardín interior. Mientras lo miraba, reía.

En el momento que estaba a punto de retirarme para no interrumpirlo, notó mi presencia y sin dejar de sonreír, me dijo:

–Es una cotorra de tu tierra, invadió muchos países de aquí y a pesar de ser un pájaro de clima más templado, se pueden observar algunas veces por estas latitudes. Están desplazando a muchas especies autóctonas europeas, pero quien les puede negar que sean muy simpáticas y graciosas.

–¿Los humanos pueden llegar a adaptarse a vivir en forma permanente y por qué no, invadir a la Otra Realidad como las cotorras a Europa?

–Somos muy invasivos y virulentos, de eso no cabe duda, pero para que suceda eso, va a pasar mucho tiempo. Hay barreras que por el momento, son infranqueables, como la necesidad de usar una sustancia externa y el límite de tiempo que podemos estar allí.

Ahora, cuéntame, ¿qué te trae por aquí? No creo que sean las cotorras.

–Hay una pregunta que no puedo resolver ¿De qué le ha servido a tu pueblo pasar al otro lado? No, en lo relacionado al progreso o bienestar personal, sino en la búsqueda del huevo.

–Antes que se produzca el éxodo, había mucha confusión en el uso de la Otra Realidad. Aunque no lo creas, el progreso o bienestar personal como tú lo llamas, se produjo mucho después. Esto vino cuando nos alejamos de los sacrificios y nos acercamos a técnicas meditativas que aprendimos con el trascurso del tiempo junto a la Willka. Una cosa fue potenciando a la otra. La unión de estas filosofías y prácticas internas, junto con los viajes al otro lado, ampliaron nuestra conciencia y conocimiento en todo sentido.

Aparte de darnos información directa sobre el Chacha, nos ayudó a poder mantenernos en la búsqueda, al otorgarnos paciencia, aceptación y sapiencia. Aunque no lo creas, esto es lo más importante que nos dio la Willka.

Sin estas condiciones, nuestro pueblo hubiera perdido el rumbo desde hace muchos siglos y seguramente, ya no existiríamos.

Los maestros en la actualidad, solamente entramos en ocasiones para no perder nuestro eje, para clarificar alguna duda o intentar adquirir algún conocimiento y quizá, no te voy a mentir, con la esperanza de que algo o alguien nos dé un dato preciso. Allí encontramos seres que saben cosas desconocidas para nosotros y también tenemos visiones, conocimientos, que nos otorga la propia esencia del lugar o quizá del universo, quien lo sabe. En el aprendiz, es muy importante para su despertar y progreso interno, hasta lograr transformarse en un chamán. En todo maestro, está la esperanza que su próximo aprendiz, sea el elegido.

–¿El elegido de qué? –pregunté.

–De encontrar al Chacha. ¿Qué más? –y luego continuó–. Como ya te he contado, mientras más profundo entramos del otro lado, adquirimos más conocimientos. Vemos y entendemos las cosas de forma diferente. A cuenta gotas, pero es conocimiento al fin. Esta profundidad, llega con el correr de los años y la experiencia. Gracias a entrar al otro lado, supimos de la existencia del Chacha y del Huevo, también su apariencia. Sabemos que debemos incubarlo, y creemos poder lograrlo tarde o temprano.

Si... nunca pudimos saber en dónde se encuentra. Siempre me pregunto por qué y acepto el hecho de que quizá, nosotros no seamos los elegidos para hacerlo. Pero sé, que nuestra función y participación es fundamental en este proceso.