02. la codicia

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Akiho y haru hicieron galletas de chocolate y las dejaron enfriar en la ventana. Mientras esperaban, akiho sacó un reloj de bolsillo y lo observó fijamente, mientras que haru observaba las galletas para saber cuando challe aparecia.

Lo que vió fue a un chico de tez clara como el papel, ojos escarlata cual rubi, y cabello café oscuro como el chocolate con leche. Este se veia desganado, con las manos llenas de parches limpiando un establecimiento, lleno de mesas y con grandes ventanas que permitian ver el exterior resaltando la estatua de un rey, y por un pequeño error este fue agarrado fuertemente del brazo y encerrado en una cocina, empezando a lavar una gran pila de platos sólo mientras unas pequeñas lágrimas caen por sus mejillas.

Haru: ese es el reino vampiro.

Akiho: Gracias haru, eres un genio.

Haru: de nada.

Akiho: ¡Ya tenemos un lugar al donde ir!.

Haru: con la ayuda de michio te puedes llevar la taberna a donde quieras, asi que ¡Vayamos con michio!, luego vemos si challe está comiendo las galletas.

Akiho: ¿Tu crees que llegue a comerlas antes de que partamos?.

Haru: si no lo hace, es porque no está en el reino de los gatos.

Akiho: ¡Vamos a averiguarlo en la ventana de confianza!.

Al ir con las galletas, estas ya no estaban aunque no se veia al chico por ninguna parte.

Haru: rayos, es inteligente como pulpo.

Akiho: ¡Challe!, ¿No quieres ver al capitán?.

Haru: *mueve sus orejas* no escucho sus pasos cerca, pero escucho unas armaduras a lo lejos.

Akiho: ¿En qué dirección?.

Haru: hm.... en dirección al campo de hierba gatera que está cerca de la puerta para salir.

Akiho: *se hace pequeña* ya sabes que hacer.

Haru: promete volver *agarra a akiho*.

Akiho: claro que si.

Haru lanzó a akiho lo más rápido que pudo y con pulso. Esta rápidamente llegó al lugar viendo a unos caballeros humanos intentando atar las piernas de challe, un chico humano de piel clara, pelo violeta con las puntas blancas, con ojos color naranja, que daba patadas fuertes para escapar, ya que no podía golpear con sus esposas por tener los brazos agarrados por otro de los caballeros.

Akiho al ver esto fue cubierta por cintas color rosa, que tan pronto como la tocaban se volvian ropa, obtuvo un vestido que desde el pecho a la cintura formaba una flor celeste con una pomposa falda blanca llena de vuelos por debajo, obtuvo unos zapatos y guantes que asamejaban a las patas de un zorro volviendo a su estatura normal.

Challe: ! *mira a akiho* aki, ¿Cómo fue que llegaste tan rápido? *sigue patealeando y forcejeando con los caballeros*.

Kitsune: haru me ayudó un poco *lanza su yo-yo hacia a challe*.

El yo-yo agarró la pierna de challe y el tiempo se detuvo, este safó sus brazos del agarre del caballero y fue con akiho.

Challe: gracias por la ayuda, por un momento creí que ya me llevaban.

Kitsune: gracias por comerte las galletas, las hice especialmente para ti.

Challe: tus galletas me ayudaron bastante, gracias a ellas ya no debo preocuparme por esparcir esperanza.

Kitsune: ay, verdad que tu eres el único diferente.

Challe: mi gema puede ser pequeña pero es importante mantenerla en buen estado *intenta romper las esposas golpeandolas contra una piedra*.

nanatsu no magicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora