I: Sacame tu cosa

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Iguro Obanai, un chico de estatura baja con el cabello algo largo y sus ojos con heterocromia, se dirigía a una misión, en el camino se encontró a su compañero Shinazugawa Sanemi.

-Buenos días, Obanai- Saludo, él era alto con un cabello plateado y unas cicatrices.

-Buenos días, Shinazugawa- Respondió el heterocromatico.

-No hace falta que me llames por mí apellido Oba, somos amigos- dijo Sanemi sonríendo.

-Pero seguimos siendo compañeros, y no me llames "Oba"- contesto molesto el pelinegro.

Sanemi Shinazugawa, había estado enamorado de Kanae Kocho la cual murió en una pelea contra una luna creciente, con el tiempo se hizo amigo de Iguro Obanai el cual actualmente es su nuevo amor. Aunque no lo quiere aceptar, el es hombre al igual que el y sabe que no es muy bien visto (recuerden que kny transcurre en la era Taisho, o sea, entre 1912 y 1926, obviamente no era "normal" o bien visto ser homosexual).

-Esta bien, perdón- Dijo riendo el de mayor altura.

-¿A dónde ibas?- pregunto Obanai.

-A ningún lado en particular ¿Vos?-

-Estoy yendo a una misión- Dijo volviendo a caminar.

-No tengo nada que hacer ¿Puedo ir con vos?- Pregunto el albino siguiendo al de menor estatura por detrás.

-Por mi no hay problema- La serpiente del chico de cabello azabache se asomó para mirar a Sanemi.

-Tu cosa me mira feo- Dijo Sanemi mirando a la pequeña serpiente con el ceño fruncido.

-No es una cosa, es Kaburamaru- Obanai aclaró enojado.

-Es lo mismo ¿O no cosa?- El albino le tocó la cabeza a la serpiente. Kaburamaru no se nego a los toques del albino, le gustaba que la acaricien -¿Ves? nos entendemos con tu cosa-

-por favor deja de decirle cosa...- El azabache cerro los ojos con el ceño fruncido.

Sanemi solo rió mientras seguía acariciando la pequeña cabeza de la serpiente. Paso una hora mientras ambos pilares de dirigían al pueblo donde se les había designado la misión (más bien que le designaron a Obanai). Una vez en el pueblo se escuchaba a los habitantes hablar, ya sea de tonterías como les decía el albino o de rumores de las desapariciones de las chicas jóvenes del pueblo.

Obanai hablaba con algunos de los pueblerinos para encontrar más información de las desapariciones de las jóvenes. Sanemi tenía a Kaburamaru en sus manos, ambos se miraban.

-que envía... Siempre estás con el...- Dijo el mayor mirando a la serpiente en sus manos -¿Tu crees que tenga una oportunidad?- la pequeña criatura se estiró y lamió la mejilla del albino -¡Jajaja para, esa mierda hace cosquillas!- Rió al sentir la fina lengua de Kaburamaru en su mejilla y la alejó un poco -... Obanai, todo lo que debes saber de el... Que envía de verdad...-

-Shinazugawa- el azabache se acercó a Sanemi.

-¿Te dijeron algo interesante?- El alto volteo a ver a su compañero.

-No mucho, pero algo me dijeron- estiró su mano para que su serpiente vuelva con el, pero está se negó y se enrollo en la cabeza del mayor.

-Te juro que no le hice nada, vamos vuelve con tu dueño, cosa- A pesar del pedido de Sanemi, Kaburamaru no bajaba de su cabeza -¡Vamos baja!- El pilar intento sacársela de la cabeza, pero Obanai le agarro la mano.

-Dejala... No me molesta, lo último que quiero es que la lastimes- dijo suspirando -vallamos a comer algo y luego salimos a vigilar la zona- Comenzó a caminar.

La cosa que nos unió ♡SaneOba♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora