[2] Solo un vistazo

287 30 1
                                    

POV: Cellbit 

Hace un par de meses me escapé de prisión y traté de irme lo más lejos de brasil, a un pueblo no muy conocido, pero con gente de diferentes zonas del mundo, fue lindo encontrarme con gente amable y que me recibieron gustosos... Ahora soy una persona nueva, apenas pisé este lugar, mi etapa de criminal llegó a su fin, solo para darles una buena impresión sobre mi persona y no arruinarlo como lo hice en mi antiguo hogar, aunque para ser sincero, voy a extrañar algunas cosas y entre esas, a mi mejor amigo.

Comencé a sentir un ruido muy molesto que venía de mi celular, un montón de notificaciones nuevas del grupo que Vegetta creo para planificar actividades, agradecía mucho saber español fluido para poder entender todo lo que decían, aunque de vez en cuando era Foolish quien hablaba en inglés para aquellos que se les dificultara entender el idioma de su marido que era de España, claro.

Para poder silenciar mi celular lo tuve que encender y entrar al grupo, leyendo un par de mensajes con curiosidad y ver que era una invitación a la gran casa de los famosos de Luque para darle una buena bienvenida a su hijo que había regresado después de años, mentiría si decía que no quería conocerlo, sentía una pequeña corazonada que le decía que aquel chico sería interesante y podría ser algo de el rápidamente.

Ahh... ¿Cómo será ese tal Roier de Luque Brown?, ¿será apuesto?, ¿manipulable?, ¿amable?, ¿tierno?

No lo sabía

eso era lo que más me molestaba.

Pero antes de seguir pensando en él con intriga, decidí responder al mensaje del azabache, algo corto y simple.

"<| Yo iré, gracias por la invitación."

Hola universo, espero que no tengas planeado para mí algo complicado, solo quiero volver a tener una vida normal junto a mis amigos, vecinos y gente que me rodea, no me hagas la vida peor de lo que fue en un momento.

Y creo que así empieza una nueva amistad y acercamiento con nuevas personas, espero caerle bien al hijo de Foolish, no quiero tener a nadie en mi contra ahora.

...

Eso es lo que supone Cellbit al respecto, una nueva amistad está por comenzar y solo quiere estar tranquilo en aquella zona, esperando una vida con normalidad para poder seguir en su misión de ser un hombre nuevo, sin importar lo que hizo en el pasado.

...

Estoy caminando a una casa ajena mientras en mi mano cargo una bolsa con snacks y un regalo para los hermanos de ese matrimonio, tuve que caminar bastante a causa de que mi auto se había averiado y lo deje con un mecánico cercano, aunque una caminadita no hace daño jamás y claro, me gustaba dar paseos.

Me siento nervioso, carajo... ya estaba enfrente de la puerta de la vivienda, me quedé unos minutos hasta que me armé de valor para tocar, dando toques con una fuerza moderada, para que se escuchara, tardaron unos minutos en abrir, iba a saludar a uno de los 3 habitantes de esa casa, pero guardé silencio al ver a un chico de tez levemente morena abrirme, usaba ropa totalmente negra, su frente era decorada por una bandana y delineado del mismo color por lo que supuse que era el famoso Roier porque nunca lo había visto.

Me quedé paralizado unos minutos más mientras lo veía a los ojos, sintiendo una corriente eléctrica en mi columna vertebral al observarlo junto enfrente mío, era guapo, aunque en él logré percibir una emoción que no me gustaba demasiado.

— Ah, supongo que eres uno de los amigos de mis padres... pásale antes de que te cierre la puerta, cabrón. —Habló en un tono suave y fingiendo una sonrisa para ocultar su desánimo, algo inútil porque a mí nadie puede engañarme.

— Gracias, yo creo que eres el hijo de Foolish y Vegetta. Me presentó, soy Cellbit y sí, soy amigo de tus padres.

Solo asintió, no quiso presentarse y solo me señaló hacia el patio trasero, para que saliera y estuviera con los demás invitados, sus hijos y sus propios padres.

Mhn, ¿Qué ocultará este niño?, se nota la tristeza en su mirada y el lenguaje corporal lo delata, espero que esté bien y logremos disfrutar la fiesta, más que eso... espero poder relacionarme con él, en este día.

—¡Cellbit!, mi amigo de toda la vida, hace tiempo no te veo — Exclamó un rubio de cabellos largos mientras corría hacía mi, apenas llegó a estar cerca de mí, me abrazó.

—¡Forever!, pensé que nunca volvería a verte, me fuiste a ver un par de veces en prisión y luego desapareciste. — Correspondí al abrazo, sin dudarlo ni un segundo y sin querer soltarlo.

Estuve mayormente con Forever, paseando por el jardín del hogar y disfrutando de unas botellas de alcohol, pasándola bien con los demás invitados y anfitriones de aquella celebración, claramente algunos no tomaban de más para cuidar a sus parejas o hijos.

...

La fiesta aún no cesaba, Forever ya se había ido con su sobrino y chico llamado Darryl, apodado BBH y yo seguía ahí, aunque ahora estaba en la sala reflexionando un poco hasta que un llanto me interrumpió, provenía de las habitaciones superiores, así que como buen investigador (chismoso) subí las escaleras hasta llegar a una habitación completamente extraña para mí, abriendo la puerta y... Oh no.

Guapito, you are mine.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora