La mañana se encontraba tranquila, las hojas de los arboles comenzaban a caer como síntoma de que el otoño se estaba acercando. El viento golpeaba con ligera fuerza las ramas de los árboles y flores, era bonita esta estación del año, ya que el sol entrega una luz rojiza y cálida, perfecto para realizar largas caminatas con una linda compañía.
Nari apreciaba como las hojas se deslizaban hasta tocar el césped mientras que escuchaba música en sus audífonos y tomaba una taza de té de Oolong. Era un sábado por la tarde, no tenía intenciones de salir, solo quedarse en casa y disfrutar un momento a solas.
Su hermano se había ido de viaje por negocios dejándola sola, no del todo ya que sus amigas y su novio iban a visitarla. Su relación con Leo estaba yendo bien, era muy detallista con ella, si pudiera cada día aparecía con un regalo nuevo.
—Ten preciosa, son para ti. —le entregó un ramo de rosas sacándole una sonrisa.
En cada triste momento le sacaba una sonrisa, la castaña no iba a negar que le había agarrado cariño, sin embargo no le causaba aquella emoción que sentía cuando miraba aquellos ojos oscuros y penetrantes, que miraba con aversión a cualquier persona, pero cuando se trataba de ella, estos le brillaban como si fuera un arte en lienzo. Cada fin de semana Leo la invitaba a salir y le compraba cosas, Nari no aceptaba aquellos obsequios ya que eran muy caros, pero por no ser mala agradecida terminaba aceptándolos.
Leo era totalmente diferente a Jungkook, él intentaba comprar su amor con obsequios caros, que en realidad no está mal, sin embargo, Nari era de aquellas chicas "tradicionales" que le gustan que le regalen cosas hechas por ellos mismos, o que salgan a un parque de diversiones, una noche de películas, y ese tipo de cosas.
Su celular comenzó a timbrar sacándole de su transe, alzó este y vio que era Leo.
—Hola preciosa, ¿quieres hacer algo?
—Hola, ¿a qué hora pasarías por mi?
—¿Dentro de dos horas te parece bien?
—Perfecto, cuidado al manejar.
—Lo tendré linda, te quiero.
—Y yo.
Tomó una bocanada de aire y se puso de pie, tenía que salir de la casa aunque no quisiera, tenía que dejar de pensar en Jungkook y todo lo que pasó. Él no dijo nada y se fue sin ninguna explicación, definitivamente iba a vivir su vida de todos modos así que ella tenía que hacer lo mismo. Quería que Leo invadiera todo su ser, conociera cada parte de ella, inundara cada pensamiento.
(...)
SeokJin ya había regresado a casa luego de un largo viaje de trabajo, se sentía bien volver a su lugar seguro.
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OUR LITTLE SECRET ; JJK - FINALIZADA
Fanfic¿Qué podría pasar si Kim Nari y Jeon Jungkook deciden comenzar con su pequeño secreto?