C.4.

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Gun se sentía demasiado tenso y deprimido para sentarse y relajarse, ni siquiera para comer. 

Podría quemar algo de energía lavando el coche, pensó, y se apresuró a ponerse un pantalón corto y una camiseta.

La verdad es que el coche no estaba demasiado sucio, pero a él siempre le había gustado verlo reluciente. La tarea de lavarlo y sacarle brillo, además de quemar estrés, le resultaba gratificante, y en aquel momento decididamente necesitaba algo que le produjera ese efecto.

Mientras cogía las cosas que iba a necesitar para embellecer el precioso deportivo blanco, pensaba.

Extrañamente Godji no regresó de su día libre e incluso lo alargó, puesto que llevaba día y medio a solas con un Off demasiado extraño. Apenas le dirigía la palabra aunque fuera para importunarle como antes o cuando se encontraban en algún lugar de la casa, él le miraba extrañamente.

¿Qué estaría planeando Off ahora? Gun tembló puesto que no se imaginaba qué, pero quizá fuera por culpa de las cintas que le dejó ver.

Después de juntar bayetas, un cubo, jabón especial para coches que no desluciera el brillo, cera y limpia cristales, caminó fuera de la casa hasta donde el coche estaba y se puso a lavar y aclarar laboriosamente, un lado cada vez, para que el jabón no tuviera tiempo de secarse. Se suponía que aquel jabón en particular no dejaba manchas, pero no se fiaba. Tay le había enseñado a lavar un coche de aquella forma, y nunca encontró método mejor.

Fue después de 15 minutos en que empezó con esa labor que Off salió. Vestía de esa manera tensa como cuando iba al trabajo y le miraba de esa forma extraña a pesar que parecía estar más interesado en el auto que en él.

-Deberías tener un perro -dijo casi con pereza.

- ¿Para qué quiero un perro? - preguntó sin dejar de lavar.

-Para que se defienda de la limpieza -dijo con humor oscuro -Un auto jamás lo hará.

La verdad es que esa frase era de Tay. A Off siempre le pareció ridícula, pero no podía olvidarla.

Gun dejó de lavar un segundo, aunque después volvió a su tarea.

- Esto es más relajante que bañar a un perro - murmuró.

Off apretó los labios.

-Te ayudaré -dijo acercándose al mismo momento que se quitaba el abrigo.

- No hace falta - cortó Gun, antes de que se despojara del abrigo.

-Insisto -Off se inclinó para tomar la espuma llena de jabón y comenzó a lavar la defensa.

- He dicho que no - y entonces le lanzó el chorro de agua de la manguera que tenía en la mano directamente a la cara.

¡Era algo que no podía soportar hacer con él! ¡Parecía que Tay no se había ido!

Ser mojado por Gun no era uno de sus planes y en definitiva le bajó los ánimos de manera bastante brusca.

Off retrocedió un poco y lo miró con sorpresa entendiendo que lo había hecho enfadar.

Oh, pero eso era delicioso. Este gesto en la cara de Gun era en verdad delicioso.

-Tu problema es que lavas algo que es frío -acusó y se quitó la camisa mojada -¿Por qué no te dedicas a algo más útil?

Gun volvió a mojarlo de nuevo a conciencia, poniendo un dedo en la boquilla para estrechar la abertura y conseguir más fuerza, volviéndole a alcanzar en la cara.

- Aquí lo veo todo frío - ironizó Gun, no muy feliz.

¡Basta!

Off se acercó con un movimiento rápido y neutralizó la manguera atrapando a Gun para pegarlo a su cuerpo y fuera consciente de su calor.

Otra realidad •𝕆𝕗𝕗-𝔾𝕦𝕟•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora