Era cerca de la media noche, bastante fría tanto que se podía escuchar la lluvia al caer, todos en la ciudad se alistaban para dormir cómodamente y poder descansar de los momentos estresantes de ese día, pero Ranpo, el mejor detective del mundo solamente tenía una pregunta en la cabeza.
¿¡Cómo carajo llegó a esto!?
Pensaba algo asustado mientras estaba en aquel elegante cuarto con un aspecto británico con ropas que sabía que no eran suyas, esperando a que el hombre con el cual se había encontrado un día antes le traía una taza de chocolate caliente.
...
18 horas antes.
Era una mañana bastante fría, comparada con la de un día anterior, el cielo estaba completamente lleno con densas nubes que daba un aspecto a qué en cualquier momento estaría por dejar caer una llovizna.
Tanto los dos Omegas como el Gamma habían despertado algo doloridos debido a la posición incómoda en la que tuvieron que dormir esa noche, además que se sentían algo cansados por haber dormido mal.
El hecho que todos los que vivían en ese departamento tenían muy mala costumbre a la hora de dormir, pues o lanzaban patadas, puñetazos o abrazaban de una fuerte manera lo que tuvieran cerca.
Así que mientras el Omega mayor despertó en el suelo después de ser empujado del sillón por el pie de Chuuya.
El menor de los tres estaba asfixiando al pelirrojo por abrazarlo fuertemente del cuello mientras esté tenía una muy mala postura para dormir, pues la mitad de su cuerpo estaba doblada de manera inhumana.
Definitivamente al despertar todos acordaron en un pequeño silencio que sería la última vez que harían eso por el bien de sus espaldas y cuellos.
Cómo siempre, el primero en despertar fue el ojiazul, aunque para zafarse del agarre del albino sin tener que despertarlo había tardado tanto que hasta Ranpo termino despertando para ayudarlo.
Atsushi al sentir que le faltaba calor y algo que había estado estrujando contra sí faltaba, abrió sus hermosos ojos bicolor para buscar a sus compañeros de piso.
A quienes no encontró pues mientras Chuuya estaba tomando una ducha, el azabache se estaba vistiendo con su ropa por la habitual de trabajo después de lavarse.
Atsushi vió su reloj no tanto que eran las 7:11, así que se paró del sofá para dirigirse a su habitación para que cuando saliera el pelirrojo meterse a bañar para quitarse todo el sudor que tenía.
Sin contar el hecho que sentía que apestaba aún a feromonas, después de todo, siempre olía un poco después de su celo.
Una vez todos estuvieron limpios y vestidos como usualmente lo hacen para ir a trabajar, Chuuya comenzó a preparar el desayuno.
Todos se sentaron a la mesa para poder comer y luego ir a trabajar.
Quitando el hecho que estaban adoloridos del cuerpo, esa mañana había sido común, nada fuera de lo normal y sin ninguna llamada de emergencia que provenga de la Agencia.
Así que todo era como siempre.
Terminaron su desayuno para después ir a buscar un taxi que los llevará a su trabajo.
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HE IS MY FAVORITE WRITER! ||RanPoe||
RomanceRanpo Edogawa no es un gran admirador de la literatura, pero ama la literatura detectivesca, aunque solo le gusta un escritor, ya que es el único que lo hace sudar y retarse a la hora de resolver el misterio escrito aún siendo el mejor detective del...