𝐇É𝐑𝐎𝐄𝐒 𝐏𝐎𝐑 𝐒𝐎𝐑𝐏𝐑𝐄𝐒𝐀 | Después de la caída repentina de un meteorito a Bahía Aventura, el grupo de amigos formado por Chase, Marshall, Rocky, Zuma, Rubble, Skye, Everest y Tracker se ven afectados de forma extraña, ya que consiguen su...
- Muy buenas ciudadano, ¿no habrás visto a mi compañero Esfumo por aquí, no? Le estamos buscando porque Fuerza necesita hablar con él - dijo ella a modo de broma
- ¿Eh? ¿Skye? ¿Qué haces aquí? - preguntó Tracker mientras se intentaba limpiar las lágrimas que tenía
- Disculpe caballero, pero yo no conozco a ninguna Skye, yo soy Vendaval, y le vuelvo a hacer la misma pregunta, ha visto usted a mi compañero Esfumo? Es que se esfuma muy rápido - volvió a decir intentando hacer un juego de palabras
- Venga, deja la coña, dime por qué estás aquí, porque no creo que sea por eso - dijo él
- Vale, pero antes de nada, dime la verdad, a tí te gusta Rubble, verdad? - preguntó ella mientras se sentaba a su lado
Tracker suspiró y se quedó pensativo, después de un momento le respondió
- Sí, si que me gusta, es muy mono
- Entonces, ¿por qué reaccionaste de esa manera? Ya sé lo que pasó con el micrófono, y la verdad, me siento un poco avergonzada, pero no tienes ni idea de cómo está ahora mismo Rubble - dijo Skye mientras tomaba aire - en este instante está llorando en mi habitación mientras que los demás lo intentan tranquilizar. Está destrozado. Piensa que sientes vergüenza por lo que dijo y que lo odias de alguna forma
- En-enserio piensa eso? - preguntó Tracker con la voz entrecortada - pero eso no es así, yo lo amo mucho, y no siento vergüenza por él, lo que pasa es que me marché porque no podía seguir escuchándolo. Durante mucho tiempo pensé que no tendría ninguna oportunidad con él. Si te digo la verdad, Skye, casi todos siempre pensamos que tú y Rubble acabaríais juntos, y al escuchar hoy que no era así, me di una pequeña esperanza, pero ahora sé que la he cagado, y mucho
Tracker comenzó a sollozar, y Skye lo abrazó intentando consolarlo
- Vamos, piensa en ello, yo nunca saldría con Rubble, él para mí es como el hermanito que nunca tuve, y yo soy lo mismo para él. A mí me gusta otra persona, y además, él te quiere con locura. Si te dijera todas las veces que me quedé hasta la madrugada hablando con Rubble de tí, o la vez que quería hacer un recortable gigante tuyo para su cuarto, o la vez que escribió una lista con 100 cosas por las que te amaba... - hizo una pequeña pausa - él te quiere Tracker, y si tú sientes lo mismo por él, yo que tú iría a buscarlo y hablaría las cosas, porque yo creo que tenéis una gran oportunidad por delante vosotros dos
- Mu-muchas gracias Skye - respondió él todavía abrazado a ella - la verdad, es que tus palabras me han reconfortado mucho
- La "psicóloga" me llaman - dijo ella en tono de broma - ahora, límpiate esas lágrimas y vamos a buscar a Rubble, porque como siga así, me va a inundar la habitación
Skye y Tracker se levantaron para ir hacia la casa de Skye, pero en vez de teletransportarse o ir volando, decidieron ir a pie para refrescar un poco la mente, con lo que ella se quitó su traje por si acaso.
Mientras tanto, en la habitación de Skye, Rubble ya no lloraba, pero seguía destrozado y no quería hablar
- Vamos Rubble, Skye llegará dentro de un momento - decía Zuma
- Pues está tardando demasiado - respondió Rocky - será que no lo ha encontrado
- No ayudas Rocky - dijo Everest algo enfadada
- Oye, ni se os ocurra pelearos, porque si no Rubble va a caer en depresión - les reprochó Marshall
- Y si voy a buscarlos?? - preguntó Chase - mi padre no ha llegado todavía
- Ni se te ocurra, que luego no puedes salir de casa y no te puedo ver - respondió Everest amenazante
Poco después de decir esas palabras, algo sobresaltó a Rubble, ya que aparecieron Tracker y Skye a su lado
- Aaaah! Skye! Que te pasa! No ves que no estoy de humor? Tracker a desaparecido! - dijo algo molesto, para luego darse cuenta de que tenía a Tracker delante - ah ho-hola Tracker
- Hola Rubble, ven, quiero hablar contigo - dijo éste mientras le tendía su mano
- S-sí - le contestó Rubble mientras acercaba su mano a la suya
Después de agarrar la mano de Tracker, los dos desaparecieron, y Skye se sentó en su silla soltando un fuerte suspiro
- Ufff! No vuelvo a hacer de psicóloga nunca más, aunque me paguen
- ¿Por? ¿Qué ha pasado? Cuenta! - dijo Zuma emocionado
Skye les contó toda la historia, dejándolos algo atónitos a todos, ya que nunca se habian imaginado a su amigo así de destrozado
Mientras tanto, en otro lugar...
Tracker y Rubble aparecieron encima de uno de los edificios más altos de Bahía Aventura, desde donde se veía todo el pueblo. Rubble se acercó a la cornisa, y se sentó en ella, admirando la bahía, mientras que Tracker lo seguía y hacía lo mismo. Estuvieron un rato en silencio, hasta que Tracker se armó de valor para empezar a hablar
- Rubble...
- ¿Si Tracker? - preguntó él
- Me gustaría que supieras que yo no siento ninguna vergüenza por tí, es más, siento una gran admiración - respondió
- ¿Por qué dices eso? - volvió a preguntar Rubble
- Porque tú... Tú en realidad me gustas - le contestó Tracker con algo de vergüenza y un gran sonrojo en las mejillas
- ¿Enserio? - preguntó Rubble emocionado
- Sí - afirmó él - me gustas desde el día que nos conocimos, desde el día en el que tú me hablaste por primera vez y me miraste a los ojos. Amo tu forma de ver el mundo, tu sinceridad, tu amor por las personas y tu personalidad. Me encantaría pasar más tiempo contigo, me encantaría estar a tu lado siempre y me encantaría que mi sentimiento fuera mutuo Rubble, porque... Porque yo te amo
- Tracker... - dijo Rubble con una lágrima en los ojos - yo también te amo. Me encantan tus ojos verdes, esa sonrisa, tus bromas, tu personalidad, tu amor por la naturaleza, incluso tu inglés. Yo te admiro y llevo mucho tiempo soñando con este momento. Tu fuiste la razón por la que empezara a dudar de mi sexualidad. Tu fuiste la razón por la que saliera del armario y tú fuiste la razón por la que empezé a amar. Yo... Yo te quiero
Al oír esas palabras, Tracker no pudo aguantar más y le dió un cálido beso en los labios a Rubble, y éste, le correspondió
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Después de ese cálido beso, los dos se separaron y se quedaron viendo fijamente, enamorándose aún más del otro. Se armó un pequeño silencio, pero Rubble lo rompió
- Tracker... - dijo Rubble con voz nerviosa - qui-quieres ser mi novio?
