Un rey una vez fue condenado;
Por sus malas acciones fue castigado.
Obligado a subir una empinada ladera;
Tan alta que ninguna de nuestras montañas se le parece.
El rey tiene solo un objetivo. Empujar una roca hasta la punta.
Sísifo de Éfira está condenado a ver cómo la roca cae una y otra vez.
Sísifo de Éfira está condenado a empujar la roca.
No tiene más opción.
No tiene descanso.
Sísifo de Éfira solo empuja la roca,
La roca se desliza por la montaña cuesta abajo,
Sísifo la observa, orgulloso de su trabajo.
Ahora, Sísifo baja la empinada ladera,
E inicia el trabajo que nunca terminará.
Sísifo ha encontrado su paz en empujar la roca,
Porque no tiene objetivos, más que empujar la roca,
Sabe que nunca va a terminar, la roca siempre va a caer.
Pero aún así, el la levanta y sigue adelante.
Sísifo se ha acostumbrado a la roca,
Sísifo se acostumbró a la montaña.
Sísifo se sentía solo,
Sísifo se sentía desesperanzado,
Pero, ahora solo son el, y la roca,
Para toda la eternidad.
Sísifo sube con la roca,
La roca rueda cuesta abajo.
Sísifo mira orgulloso su trabajo y sube la roca,
La roca cae,
Sísifo baja;
Sísifo de Éfira es feliz empujando la roca.

ESTÁS LEYENDO
Pensamientos De Medianoche
De TodoRecopilación de poemas extraños e historias cortas para el disfrute de quien se atreva a leer