𝖠 𝗅𝗂𝗍𝗍𝗅𝖾 𝖮𝗅𝖽𝖾𝗋 ;: 𝒯ℴ𝓂 𝒦𝒶𝓊𝓁𝒾𝓉𝓏

04| Tus ojos no mienten

NATALY KLUM.

Al parecer eso era un sí, llegamos, era una gran escuela, parqueo el auto de la forma más atractiva que he visto en mi corta vida y salimos juntos del auto.

- Gustav, hermano, ¡que gusto verte! - Dijo Tom saludando a un hombre macizo y de estatura baja.

- ¡Hey! Tom, ¿viniste a traer a tu sobrina política? - Dijo.

- ¿Ah? Sobrina política no es, eso ni existe tonto.

- Ja Ja Ja, no me creas, estoy aquí con mi esposa, ¿Dónde está Heidi?

Vi como su aspecto cambiaba, una expresión de asco se mostró, decidió cambiar de tema.

- Mira, ella es Nataly - Dijo Tom mostrándome.

-Ah... te conozco, eres Nataly Klum, la sobrina de la esposa de este señor guapo, encantado de conocer a una chica tan hermosa como tú.

Extendió su mano, se la di, le di un gesto amable y me dirigí al mayor que se encontraba a mi lado.

- Tom, deberíamos entrar ya... - Dije agarrando su mano suavemente.

El me miró y volvió a dirigirse a el hombre que se encontraba frente a el, se despidió de su amigo y me agarró de la mano.

-¿Preparada?

No quise responder, era un rotundo NO, no estaba ni un poco de preparada para iniciar un nuevo año con otro entorno, entramos a una gran puerta, un señor un mayor estaba sentado en la oficina.

- Muy buenos días señor Kaulitz, que gusto verlo.

- Muy buenos días señor Tyson, el gusto es mío.

- ¿Y bien? ¿Ella es la nueva niña de la que Heidi me habló?

- Si, es ella - Tom se giro a verme, debía decir algo.

-Hola, soy Nataly, Nataly Klum, es un gusto conocerlo - Dije haciendo una pequeña reverencia.

- Muy bien Nataly, puedes pasar a tu aula, es el aula 28 en el segundo piso.

Le hice un gesto a Tom para que me acompañará, no quería ir sola.

- Señor Tyson, guiare a Nataly hasta su aula, espéreme un momento.

Ambos salimos de aquella gran oficina, nos dirigimos al segundo piso, me detuve en la mitad de la escalera.

- No quiero ir - Dije mirándolo.

- Tienes que ir.

- Pero no quiero ir - Dije bajando una escalera.

El se quedó callado, se acercó a mí y mi abrazo, me susurro en el oído.

- Debes ir, recuerda que tú tía no quiere qué te quedes como una desgracia en la vida de tu padre... Vamos, entra a clases.

Quedé congelada al escuchar su sexy voz en mi oído, y sus manos bajando lentamente por mi espalda hasta pegarme por completo a él.

- ¿Podría faltar solo hoy? - Le susurre.

Sentí sus cálidas manos apretar suavemente mi c*lo y acariciarlo, el suspiro...

- Está bien, solo hoy, pero mañana vendrás.

Se aparto de mi y me pasó las llaves del auto.

- Anda y quédate ahí.

Agarre las llaves y terminé de bajar las escaleras, salí del gran colegio y me dirigí al auto, pero una voz burlona y gritona dijo mi nombre.

- Con que la sobrina de Heidi Klum va a estudiar acá, ja ja ja, que poca cosa eres.