CAPÍTULO 21: "Todo estara bien"

307 21 1
                                    

Narra ___

El dolor que sentía era incomparable, tenía la sensación de que mi vientre estaba por explotar en cualquier momento, mi vista se ponía borrosa de vez en cuando. No sentía ningún otro dolo más que en la parte baja de mi estómago.

Todos me veían asustados y ansiosos. Escuchaba a Alice hablar con Carlisle mientras Michael me veía con una expresión asustada. Edward me inyectaba algo, Jacob se llevaba a Bree y Carlo sostenía mi mano. Rubi prefirió no entrar.

Rosalie quería cortar, prefería que me doliera como los mil infiernos a que algo le ocurriera al bebé.

___: ¡Edward, sácalo ya!

Él estaba tomando la mano de Rose, impidiendo que realizara el primer corte que permitiera la salida del bebé, así que con algo de duda la soltó.

Rosalie corto sin titubeos. Solté un grito apretando la mano de Carlo, debo decir que el dolor humano no era para nada mi parte favorita en este proceso, era obvio que mi parto no era normal, pero dudo que un parto humano sea mucho mejor de lo que estoy sintiendo ahora. El dolor punzante estaba adormeciendo por sí solo mi cuerpo, estaba perdiendo la conciencia, pero tenía miedo, si sedo al dolor, temo no despertar, para ver a mi bebé, para pasar mi vida junto a él, para ver en todo si esplendor a mi familia.

Rosalie miro aquel bisturí con sed, y deseo. Esto provocó que fuese lanzada por Edward, para evitar cualquier tragedia. Si la situación no era la mejor, todo lo que estaba ocurriendo solo me ponía más ansiosa. Carlo me miraba dolido y preocupado, sabía que sin duda sería un trauma para él, verme de esta manera, sintiendo mi dolor. Era todo menos algo hermoso.

Edward: Resiste amor. — Vi como acercó su rostro a mi vientre. Más dolor recorrió mi cuerpo, tenía la boca llena de sangre.

___: ¡Detente! — Mis lágrimas ya no me dejaban ver, y mi garganta estaba sufriendo cada grito que soltaba.

Podía sentir como desgarraban varios tejidos de mi interior, estaba mareada, abrumada por el dolor, lo único que quería era cerrar los ojos y descansar. ¿Mi motivación? La sonrisa sorprendida y alegre de Edward.

Carlo miraba algo con sorpresa, se acercó a Edward para cargar a mi bebé. Se veía tan bello y frágil. Algo que sin duda me dejó en shock fueron aquellos dos llantos que se dejaron escuchar. No sabía si era cosa mía, así que decidí mirar a mi esposo, sostenía otro bebé, ambos pequeños me miraban atentamente con una expresión calmada, incluso el bebé que sostenía Carlo fue capas de mostrarme una sonrisa.

Edward: Son gemelos. — Me miraba alegre. Mi sonrisa débil mostró la alegría que sentía al verlo así.

___: Mis bebes. — Edward los miraba con tanto deleite al igual que yo.

Sentí bastante cansancio, mi vista se oscurecía sin necesidad de parpadear. Con las pocas fuerzas que me quedaban, acaricie aquellas mejillas regordetas. Lo último que vi fue el rostro confundido de Edward.

Narrador omnisciente

___ había dejado de respirar, su corazón ya no se escuchaba, su cuerpo ya ni siquiera temblaba debido al dolor. Su rostro se quedó viendo al mismo punto, sin parpadear, sin movimiento.

Michael: ___. — Hablaba la pelinegra. — ¡___! — Movía el rostro ahora frío de la matriarca de su clan.

Edward: Michael, sostén al bebe. — Edward le ofreció al pequeño varón.

Guerrera Escarlata - Edward Cullen y Tu -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora