La casa era un caos. Cosas tiradas por todos lados, ropa y zapatos por doquier y un pequeño omega que correteaba de arriba a abajo.
ㅡ¡Lily, apúrate! ¡Luca y Louis, ya dejen de jugar y métanse a bañar!
Lisa nunca supo que tenía su esposa con los nombres con L como para nombrar a todos sus hijos con la inicial pero ella simplemente se dedicaba a asentir y sonreír.
ㅡ¿Mamá, sabes donde está mi camisa celeste? ㅡLuca, uno de sus hijos menores se dirigió a ellas desde el marco que separaba la cocina del comedor.
ㅡEn el cesto de la ropa sucia, te dije que si la querías limpia debías lavarla tú.
ㅡPero mamá... ㅡlloriqueó el alfa de casi 16 años.
Lisa pudo sentir como la mirada de su pareja se clavaba en el adolescente y luego a su hijo agachar la cabeza suspirando antes de correr escaleras arriba.
ㅡ¡Creo que prefiero la rosada!
Lisa rió sabiendo cuán de desordenados podían ser sus hijos, ya que lo habían heredado de ella, para luego acercarse a paso lento hasta donde su omega revolvía algo en una sartén.
Envolvió sus brazos en la estrecha cintura de su compañera sintiendo como poco a poco el pequeño cuerpo se iba liberando de la tensión que contenía. Restregó su rostro en un lado de su cuello, contrario a donde se encontraba la marca, para llenarse del suave aroma a lavanda que tanto caracterizaba a Jennie.
La oyó suspirar mientras dejaba ir todo su peso sobre su pecho. La marcó con su fuerte aroma y acabó con un pequeño roce de sus labios.
ㅡAmor, tranquila, todo está saliendo bien.
ㅡNo, Lisa, nada está bien. Los niños no están listos, todavía no me cambio de ropa, sabes que detesto cocinar pero aquí estoy haciendo esta sopa... ㅡenumeró Jennie mientras pasaba sus dedos por su cabello con un estado de nerviosismo evidente.
Lisa llevó sus manos a las mejillas contrarias, conteniendola, mientras conectaba sus miradas. Jennie se calló de golpe. Afianzó sus manos en los antebrazos de la alfa y llenó sus pulmones del aroma tranquilizador que se le otorgaba.
La burbuja de tranquilidad que se había formado entre ellas se vio interrumpida por la repentina entrada de su hija mayor, Lily.
ㅡMamis, necesito preguntarles algo... ㅡla muchacha se acercó a paso vacilante a ellos.
La alfa de 18 años, enfundada en un traje blanco y un body de encaje en el mismo tono, se balanceaba nerviosa de un pie a otro mientras sus grandes ojos escaneaban los azulejos del suelo.
Jennie se acercó hasta ella al percatarse de como su aroma a sándalo y menta se intensificaba por el nerviosismo. Tomó sus manos suavemente y levantó su mirada para conenctarla con la de su hija.
ㅡ¿Qué sucede, amor? ㅡinquirió con ese tono maternal que los años le habían otorgado.
Lisa se acercó a ellas y posicionó sus manos sobre los hombros de su hija en señal de apoyo.
ㅡYo quiero saber si... entiendo si no están de acuerdo o si no quieren... ㅡla chica comenzó a divagarㅡ pero…
ㅡMi vida, puedes decirnos lo que quieras, lo sabes.
ㅡYo me preguntaba si podría llevar a alguien a la cena de hoy... ㅡsus mejillas se tornaron carmesí mientras apretaba las manos de su madre.
Jennie levantó las cejas con curiosidad y miró a su esposa con la misma reacción. Ambas se quedaron pasmadas ante la insinuación de su hija.
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¿Se agranda la familia? | Jenlisa
Fiksi Penggemar↪¿Qué sucederá cuando la familia Manobal-Kim se vea patas para arriba por la posible llegada de un nuevo integrante? Cada uno deberá introducirse en un mar de emociones, cambios y modificaciones que dejará un sin fin de alteraciones a su paso. Algun...
