El diamante del imperio

Capítulo 2 Secretos sabor a té

Un día nuevo comienza en el palacio de la emperatriz, me encontraba en una elegante y sofisticada cama de la habitación que la emperatriz mando a confeccionar precisamente para que la hija de los duques de Persalis se sintiera a gusto. La emperatriz mandó al servicio de las criadas a despertarme. Oí como la sirvienta tocó la puerta

- Buenos días, señorita, su alteza imperial ordeno que la levantáramos y arregláramos -

no opuse mucha resistencia y me levanté para dar comienzo al día de hoy

- A que se debe que traigan tantos vestidos? Me he estado perdiendo algo? -

la sirvienta muy amablemente me sonrió y dijo

- Señorita, usted no estaba enterada del baile que se celebraba esta noche? -

Me quedé un rato pensando y reflexionando de todo lo que la emperatriz me dijo en la noche

- "Y mañana se celebrará el baile de apertura del verano" -

- Ah, es cierto, el baile de apertura al verano. Qué error más grande haberme olvidado..., igualmente, porque hay como 10 vestidos? -

- Su majestad quiere que usted misma eligiera dos de los que ella consideraba adecuados para la ocasión -

Después de la selección, me dirigí escoltada por una de las sirvientas del palacio hacia el comedor, donde me esperaba la emperatriz, y mientras recorría un pasillo largo, escuché a un par de sirvientas cuchichear en voz no muy alta

- Habéis escuchado lo que la emperatriz hablo con el príncipe en la noche? -

- Sí! La emperatriz dijo que si todo sale como ella lo está planeando, había posibilidades de que esta noche se anunciara públicamente el compromiso de la joven duquesa y el príncipe! No es asombroso? -

dos de las tres sirvientas se percatan de que estaba pasando justo al frente de ellas

- Y también he oído que-... -

Se calla al notarme

- B-buenos días, señorita Persalis, n-necesita usted algo? Si es así, no dude en pedírmelo -

Me limite a darle las gracias por el servicio e irme. Obviamente, no pude contener mi curiosidad y empezé a hacerme preguntas

- Como que hoy mismo? Supuse que se anunciaría durante la semana o bien mi último día de estadía. Cuál es la prisa de la emperatriz...-

Por fin había llegado al pequeño comedor donde disfrutaría del desayuno con la emperatriz. No e de negar que estoy algo nerviosa por lo que pueda decir o hacer sobre el compromiso... Bueno total, sé que acabaré quiera o no comprometida con Barsen. La sirvienta le abrió la puerta. Y educadamente salude a la emperatriz

- Buenos días su majestad, espero que haya amanecido correctamente -

La emperatriz me mira con una sonrisa amable

- Buenos días, Ceris, por suerte hoy amanecí con un buen humor y puedo ver que tú también -

Si realmente supiera lo nerviosa que estoy alteza...

Tomé asiento en el sillón que justo estaba al frente de la emperatriz. Mientras la sirvienta sirve el té, la emperatriz inicia una conversa

- Y bueno, que te parecieron los vestidos que te envíe? Espero que tengas clara tu elección, ya que hoy va a ser un espectacular baile -

Teme un sorbo de té y asentí con la cabeza

- La verdad su alteza, me costó algo elegir, todos eran radiantes, pero uno de ellos realmente deleito mis ojos: El vestido rosado con piedras de cuarzo relucientes -

- Excelente, además de hermosa diamante, tienes un gusto exquisito. Sé que contigo disfrutaré mucho en este agobiante palacio -

No mucha gente sabia que la emperatriz siempre anhelo tener una hija, pero para su suerte concibió a dos varones, que bien, para la línea sucesoria venía de perlas, pero para ella no. La familia del ducado de Persalis siempre tuvo una muy buena relación y exactamente la Duquesa, mi madre, tenía asegurada su línea sucesora y consiguió tener una hija y no cualquier niña, sino a la niña que por su belleza le decían "el diamante del imperio", cosa que hacía que la emperatriz muriera de celos y quería que a toda costa que yo contrajera nupcias con el sucesor al trono, su hijo.

Media hora más tarde y después de estarlo pensado bien la emperatriz fue directa y me dijo

- Querida, a lo mejor ya lo habrás escuchado y pensaras que es un rumor, pero, te anuncio que en el baile se anunciara el compromiso, y no te preocupes por tu familia, ya se les notificó y aceptaron a la petición -

Gracias a Dios que una de mis mayores cualidades es mentir y actuar bien delante de una situación que me genera nervios

- Sinceramente alteza pensé que era apresurado, ya que no hace más que un día que llegue a su residencia, no quiero sonar mal agradecida y mucho menos insolente, pero pensé que se haría público entre semana o bien al finalizar el periodo de estadía en el palacio, con todo respeto su alteza -

la emperatriz con una sonrisa tonta dijo

- Lo sé y te entiendo, pero comprende que el que va a ser coronado como emperador al finalizar la semana no tenía una prometida como tal, así que debido a eso me vi obligada a tomar un rumbo apresurado, pero créeme que nada saldrá mal. Una emperatriz nunca hace nada sin haberlo planeado con antelación -

Precedió a guiñarme el ojo.

conque ella ya lo tenía pensado desde hace tiempo, pero no entiendo el porqué el dia de hoy me quiere comprometer con Barsen...

- oh, entiendo alteza, entonces no habrá ningún problema esta noche -

- A, se me olvidaba comentarte que mañana le pondremos fecha al compromiso. Quiero que sobre las 6 pm estés en mi despacho. -