La Trampa es Ley | Taiju Shiba [+18]🚫CANCELADA🚫

23|Nuestra

Pasé el resto de la tarde con Rindou. No tuvimos que decirle nada a nadie, después de todo tanto mi hermano como el jefe sabían que me quedaría con Yuzuha.

Para mi desagrado no ocurrió nada mas allá de algunas caricias. Parece que Rindou es suficientemente listo como para no meterse con la hermana de su amigo, en fin ¿que se le va a hacer si no quiere dar el primer paso?

《•••》

La mañana siguiente es fría, parece que lloverá pues el cielo está completamente gris, pese a ser pasadas las seis de la mañana.

Desperté sola en la cama con la única compañía de Robinson ya que Rindou pidió dormir en el cuarto de invitados.

Es raro, siempre he despertado sola en una cama grande y lujosa. Al menos desde que cumplí 9 cuando Suito dijo que tenía que dejar de ser tan miedosa y se negó a volver a dormir conmigo.

Esta ha sido mi rutina durante 10 años...

Pienso luego de girarme para ver la ventana.

Incluso ayer desperté sola antes de ir a la obra de mis hermanos... ¿Entonces porque me siento tan mal?

—Toc, toc — La voz de Rindou me distrae de mis pensamientos.

Se encuentra parado junto a la puerta con una bandeja en las manos.
En ella se alcanzan a divisar un vaso de café, un par de waffles y una aspirina.

—Buenos días princesa.

—Buenos días Rin— A duras penas logro incorporarme al tiempo que Rin se me acerca.

—¿Como te sientes?

—Bien— miento —Creo que a la rata le gusta esta cama.

—Eiya...

—Lo digo enserió.

—Tienes el maquillaje corrido...

—Oh.. supongo que olvidé desmaquillarme anoche; aveces pasa, superado.

—Solo el maquillaje de tus ojos... ¿lloraste?

Bajo la cabeza. No tengo otra respuesta para dar y el lo sabe.

—No tienes que ir hoy con ese perdedor, ¿que opinas si nos quedamos aquí? Puedo traerte ese helado extraño que te gusta. ¿Cual era el nombre?... ¡De mantequilla!

—Esta bien Rin, puedo con esto. Siempre puedo.. mejor acompáñame a comprar regalos, hoy veré a la mamá de Mitsuya y posiblemente también a sus hermanas.

Tomo la aspirina y me paso con el café.

—Eiya acaso tu y Taiju...

—Otra cosa Rin — interrumpo tomando su mano con delicadeza —No dejes que mi padre ni mi hermano sepan de esto, por favor.

Una sonrisa débil sale de mi. Posiblemente más triste que débil pero es suficiente para que Rindou acepte a guardar esto entre nosotros.

Me dirijo hacia el cuarto de baño, pata darme una ducha antes de salir.

Rindou queda parado en el medio de la habitación y con una seña le pido qué se acerque, empiezo a desvestirme con cuidado.

Podria reírme de la cara del haitani,sus ojos violetas recorren mi Figura entera, sus pasos son vacilantes cuando se acerca hacia mí, quedando a un paso de distancia, tomo el dobladillo de su camisa y el sube sus brazos para que pueda retirar su camisa, el mismo baja su pantalón y su ropa interior.

Lo necesito cerca.

Con la regadera encendidas y las manos de rindou acariciando mi piel mientras enjabona mi cuerpo.