Cookies With Milk 🥛🍪 국민/Kookmin

🥛F I N A L🍪

Llegó la noche del sábado, el día de la tan esperada cita de Jimin y Jungkook, día donde éste último le confesaría su amor al chico, claro que muchos dirán que no hace falta, pero cuando una persona no está satisfecha con pequeños detalles y lindas palabras como "te quiero" o "eres el mejor" o un simple "me haces el humano más feliz de la tierra" es difícil aceptar que con eso ya es más que suficiente.

Jimin estaba bastante agradecido con todos los regalos que Jungkook le enviaba, ramos de flores, peluches gigantes, perfumes caros y hasta lo llevaba a comprar ropa, o en otros casos, el omega le pedía el favor de acompañarlo. Comían helado y veían películas juntos en casa del mayor, comiendo uno que otro snack que compraban en el camino.

Si bien lo material no importa, a Jungkook le gustaba regalarle cosas a sus pareja, los antiguos ligues de su adolescencia siempre quedaban encantados con sus regalos, lo lamentable era, que sólo lo buscaban por su dinero, cuando el buscaba algo estable, alguien con quien poder compartir momentos inolvidables y pasar sus días con esa persona, pero todos lo engañaban.

Cuando de dió cuenta del interés de las personas, Jungkook dejó de ser el chico romántico que buscaba una bonita relación duradera, comenzó a ser un poco más frío y distante, ya casi no sentía nada por nadie.

Hasta que llegó Jimin.

Con ese chico su mundo parecía andar a su favor, había vuelto a sonreír, había vuelto a ser amoroso y apasionado como solía serlo antes, incluso había cambiado su forma de vestir únicamente por él. Aún seguía impresionado de lo que podía llegar a hacer por ese omega, era como un recordatorio de que podía ser una mejor persona y cambiar. Aunque habían ciertas cosas que no podía cambiar debido a que ya estaba en su naturaleza, gasta en ragalos caros y lugares lujosos para darle al omega una experiencia inolvidable, era una de ellas.

Jimin siempre le decía que no era necesario, que podían ir a otro lugar y pasar el rato ahí, pero no, Jungkook siempre quería impresionarlo, y lo hacía, pero aún así, el omega siempre le hacía recordar que aunque vivieran sin dinero y sin lujos, lo seguiría queriendo por lo que es y no por quien es. A final de cuentas el amor incondicional es el más importante ¿no?

El chico caminaba de un lado a otro en su habitación mientras mordía su uña del dedo pulgar, producto del estrés de aquella noche al no saber que ponerse para ir a su cita, y para un punto bonus, Jungkook llegaría a más tardar media hora, y él no se había ni rizado las pestañas. Estaba nervioso.

Jin, su hermano mayor y quien había estado mirándolo desde su cama mientras escribía en su laptop chateando con un posible amigo, le mira nuevamente y niega con la cabeza, enviando el mensaje y dejando la laptop a un lado para después levantarse de su cama y caminar hacia el menor.

-¿A qué hora piensas vestirte?-Cuestiona cruzado de brazos.-Si bien tengo entendido que dijiste que Jungkook vendría a las ocho en punto, son las siete con treinta y ni te ha puesto una camisa.

Jimin detiene su caminata sin rumbo y mira a su hermano con preocupación notoria.

-Es que no sé que me voy a poner, Jin-Confiesa el menor.-Tampoco Jungkook me dijo a donde iríamos, no sé si debo ir formal o civil, o semi-formal... ¡Ahg, soy un desastre!

Y comienza a caminar nuevamente en círculos. Seokjin entorna los ojos antes de caminar hasta el armario y tomar algunas prendas que consideraba le quedarían bien al omega menor de la familia Park, las dejó sobre la cama y luego detuvo a Jimin de su caminata, o sino, terminaría abriendo un hueco en el piso.

-Escúchame, ridículo-Jimin estuvo por protestar en contra del apodo, pero el mayor continuó.-Todas las cosas que te pones, por más sencillas que sean, te hacen ver bien y elegante ¡Hasta un pijama lo haces parecer como un traje de gala!-Dice para tratar de bajar los nervios del omega, lograndolo de a pocos pues el chico ríe ante sus palabras.-Es tu estilo sencillo, no necesitas cosas extravagantes para verte bien porque no lo necesitas, ya de por si te ves bien con lo que sea.