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La hora del almuerzo llegó y el empresario fue a buscar a su marido.

...—Amor...¿vamos a comer?

—Oh si, la verdad es que estoy hambriento—contestó Khaotung este rápidamente levantándose de su sillón.

Bajaron en el ascensor a la planta de la cafetería y el restaurante, sin parar de besarse.

—Te extrañé mucho, mi amor— le dijo el empresario besandolo sin dejar de abrazarlo.

—Yo también a ti

A este le encantaba la nueva actitud de su marido pues sin duda era tan dulce y tierno que le hacía derretirse más por su ser y agradecía esos meses que éste había pasado en la clínica, ya que lo habían renovado completamente.

Llegaron al restaurante por fin y se sentaron.

—Recuerdo la primera vez que vine aquí contigo. Estaba tan nervioso y abrumado por todo esto. Ese fue un buen día

—Si lo fue...Te prometo que a partir de ahora habrá muchísimos más—dijo First cogiéndole la mano para acariciarle.

El ayudante sonrió sonrojado pues jamás pensó que estar enamorado era estar tan bien y sentirse tan protegido y especial.

—¿Comemos?, estoy hambriento

—Claro, amor

Ese nuevo primer día  fue increíble pues Khaotung se adaptó perfectamente a su nueva vida, esa que siempre había deseado y que tenía gracias a su perfecto y atento esposo.

La convivencia fue genial entre ellos pues First lo adoraba, también en el trabajo todo les fue sobre ruedas pues después de semanas casi desatendida, el empresario volvió a coger con ganas las riendas de su empresa

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La convivencia fue genial entre ellos pues First lo adoraba, también en el trabajo todo les fue sobre ruedas pues después de semanas casi desatendida, el empresario volvió a coger con ganas las riendas de su empresa.

Entre el trabajo y atender  a su esposo, Khaotung encontró tiempo para visitar a Mark, con el que charlaba e intentaba de dejará esa vida y se buscará un buen hombre y un trabajo decente, sin embargo su amigo nunca le hacía caso.

Incluso en sus últimas visitas optó por darle trabajo en la mansión como ayudante de la cocinera pero este se negó también, lo que en repetidas ocasiones provocó el enfado con su amigo.

Lo que Mark quería era que llevasen a cabo sus sueños y para ello Khaotung debía divorciarse de First y quitarle la mitad de todo pero el ayudante no quería hacer tal cosa.

...-¿Dónde quedaron nuestros sueños?, ¿dónde quedaron nuestros planes de irnos lejos y vivir juntos disfrutando del dinero del divorcio?-Mark estaba defraudado—Ya casi pasaron siete meses de tu matrimonio con Khanapan y aún no lo dejas

—Amigo, ya no quiero seguir con eso

—Pero... ¡tú me lo prometiste!, ¡me dijiste que volveríamos a vivir juntos y que...

5. El nuevo secretario - FirstKhao - Tercera parte TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora