•CAPÍTULO 47•

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Viernes 24 de diciembre.

22:00 pm.

Ya estába todo listo. Estábamos todos reunidos. Cada detalle en su lugar. Todos en la mesa cenando. Era noche buena. Dos horas más y estaríamos en navidad.

La gran y tan buena de Celia nos dejó precocinado todo antes de irse a pasar las fiestas con su familia. Entre las cuatro mujeres nos ocupamos para terminar de cocinar,y ultimar detalles en la mesa.

Todos vestimos guapísimos y elegantes.
Sofi traía el vestido que tanto le costó conseguir,uno de seda con una larga y perfecta caída en los talones,y mas corto por delante. De un color rojo sangre,y con brillos estupendos. Unos zapatos de taco aguja color negros y detalles preciosos en las puntas. El pelo ondulado como siempre y suelto.

Cintia se colocó un vestido verde con escote en V y abierto en un costado de la pierna. Era bellisimo. Y unas sandalias a combinación.

Vero traía vestido de color fucsia muy llamativo e increíble,abierto en la espalda y de lentejuelas.

Los hombres llevaban trajes negro y moño de color rojo,con camisas blancas.

Yo me decidí por un vestido largo color azul,con tajo al costado de una pierna y finas tiras en los hombros,algo simple pero con mucho brillo,y unos zapatos bajos de color gris plateado.

23:30

Media hora,treinta minutos y seria navidad. Probamos el postre tradicional de la familia de Celia,nos lo dejo como regalo y nos sorprendió,en verdad era exquisito. Una torta helada llamada tiramisú y tenía unos sabores deliciosos.

Todos charlaban distintos temas y seguían seguían ruta. Jojo miraba dibujos mientras esperaba para abrir regalos. Yo salí al jardín y me senté en los sillones frente a la piscina.

Recordé mi cumpleaños número 17. Era increíble como había pasado un año de aquello. Parecía todo tan reciente. En este mismo lugar lo había visto por primera vez. Había tropezado y él me había rescatado. Había entrado a mi corazón sin permiso y sin darme cuenta caí a sus pies. Me rendí ante el amor,y me dejé llevar,para que nuevamente esté donde comencé;en la nada. Sin romance. Sin él. Destruida otra vez.

En treinta minutos era su cumpleaños. Cumplía 21 años. Estando en otro país. Lejos. Sin mí. Sin nosotros. Tal vez siendo feliz.

Inconscientemente una lágrima cayó sobre el vestido que cubría mis piernas. La quité rápidamente y recordé lo malo también,y el por qué de nuestro final. Me levanté decidida a no arruinarme la noche así,topé con Sofi que estaba atrás mío.

Comprendía lo que sentía o se asemejaba. Sabía que recordaba exactamente lo que recordaba. Sin decir nada sólo me abrazó fuerte. También la abracé y no quise soltarla nunca. Ya iban 5 años de nuestra amistad y es lo mejor que pude encontrarme en este mundo de crueles.

Entramos para los regalos de Jojo y el brindis.

00:00 pm. Salud!!!

Ya eran las navidades. ¡¡Felices fiestas!!

Jojo abrió sus regalos y se emocionó. Enseguida se puso a jugar con los camiones y la pista de autos hasta que se quedó dormido abrazado a un coche.

Nos quedamos un rato más y luego cada uno a su habitación. Mañana iríamos a recorrer el centro y como tradición de siempre a gastar en cine,restaurantes,teatros y todo lo que se nos ocurriera. Era un pequeño gustito que nos debamos en las fiestas.






25 de diciembre.

Después del cine,el teatro,el almuerzo en el gourmet,el parque de diversiones,el shopping y gastar por gusto regresamos a la mansión.

Sofi y Vero volvieron a su casa para buscar unas prendas que olvidaron. Me sentía algo vacía sin la compañía de Soff ahora,pero en la noche regresarían.

Estaban todos adentros descansando,y yo fui por algo de sol,o algo parecido en esta época invernal. Me recosté sobre una manta y cerré mis ojos mirando al cielo. Ya se notaba la nieve,pero aún faltaba para que cubriera el jardín entero.

El sonido del timbre correo me despertó de mi corta siesta. Salí a atender,ya que todos estaban de vacaciones ahora,inclusive el portero. Recogí las cartas que había y por error,tal vez sin querer,tal vez en señal del destino leí el destinatario de la carta;yo. Una carta para mí. Muy raro la verdad,pero lo más raro fue el remitente. No sé si raro,pero...si muy extraño realmente.
Era él. Mateo. ¡Ay! Tanto tiempo sin pronunciar su nombre.

Coloqué las demás cartas en la mesa de entrada y corrí a mi cuarto para leerla. Aún que no sabía si deseaba leerla en verdad.


Papá llamó a la puerta interrumpiendo.

---Pasa--- contesté

---Hola Vicki,cómo estás ? Fui por medialunas y hay chocolate caliente preparado,por si quieres----

----¡Aaaah!!! Gracias pa. Enseguida bajo----

Amaba el chocolate caliente en época. Salté de la cama y fui corriendo bajo escaleras.







TRES DÍAS MÁS TARDE...

Era 27 de diciembre. En menos de un mes las clases regresarían. Me llevé una taza de chocolate caliente a mi cuarto,ya que me encontraba sola.

Papá regresó a la empresa y Cintia fue de compras con Jojo y una amiga de ella. Me invitaron,pero decidí rechazar la oferta está vez,aunque era tentadora. La indumentaria invernal en el "Callejón Intidustrial" durante está época era a bajo costo,a niveles de donde cuesta en todos lados.

Buscaba una buena película en la tv y maldita sea,el control remoto se me zafó de las manos.

Cayó abajo de la cama. Coloqué la bandeja con el chocolate caliente en la minimesa y busqué el control,pero antes de verlo,me encontré con un papel.

No cualquiera;era la carta de Mateo.

Insegura de si leerla o no,tomé impulso y rompí el sobre. Abrí la carta y respiré hondo varias veces antes de leer el título.

Recién habían pasado tres meses desde nuestro último encuentro. Era poco tiempo,pero también se hacía largo.

Para Vicki...

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