El diario de un asesino: Parte VI

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Reporte del dia: 25/06/2016
Miembro: 032
Objetivo: 112
Asunto: El Templo de las almas

Sobre las 10:00 horas me encontraba conduciendo hacía el hotel donde habia quedado con el contacto, no me gusta empezar el día tan tarde pero no podía exigirle nada, era un favor que me hacía ya que debió haber viajado desde Madrid en donde estaba, una vez en la recepción del hotel espere al rededor de 10 minutos esperando la confirmación para entrar a la habitación que me había dicho, la seguridad del hotel era inquebrantable por lo que la información en esta reunión será confidencial, al entrar a la habitación el contacto me recibió:

- Señor Mathews, ¿Cómo se encuentra? - Saludó extendiendo su mano para saludarlo.
- Excelente, ¿Cómo le fue en el viaje? - Dije aceptando el saludo con mi mano
- Un poco agotador, tengo algo importante de que hablarle así que preferí hacerlo en persona - Me decía el contacto nervioso mirando al rededor mientras me invitaba a sentarme en la silla.
- ¿Qué ese eso importante que debe decirme? - Dije mientras me sentaba en la silla de la mesa junto a el.
-"Hay sospechas de que un detective le está pisando los talones y sabe mucho más de lo que puede pensar usted." - Decía el contacto por medio de ondas mentales mientras abría su portafolio brindandome una fotografía del detective, sin duda era el hombre que había visto días antes en la casa de la madre de Stephanie.
- "Ya tengo algunos datos de el, en estos días será neutralizado." - Contesté usando el mismo medio de comunicación.
- "Este es el documento que indica que se te ha propuesto un nuevo objetivo, debes cumplir con esta nueva orden con una duración máxima de 2 días, si no lo ha logrado se tomará medidas drásticas frente a su futuro en la agencia".
- "Tengo una orden principal, necesito terminarla primero para seguir con una nueva orden, para eso te llamé, necesito que me ayudes con lo que te comenté."
- "No puedo decirte como hacer eso pero puedo entregarte una hoja en especifico del libro La orden de Arkka que sé que te ayudará en algo." - Me decía mientras sacaba una hoja y la enrollaba antes de pasármela a la mano.
- "Antes de terminar nuestra charla, quiero pedirle un juez y un general de policía para Waledyt que me ayuden con el termino de la misión, el resumen se lo mandaré pronto."
- Buena suerte Mathews, necesito que desaloje la habitación a más tardar, 1 minuto. - Habló el contacto asintiendo con su cabeza.
- Gracias. - Contesté tomando los nuevos documentos que me había otorgado y los guardé en mi maleta, una vez hecho abandoné el hotel y me dirigí hasta la casa norte.

El observador 517, normalmente los observadores tienen la tarea de vigilar y ayudar en que todas las órdenes se cumplan de manera correcta y que no hayan errores en el camino, cada miembro tiene su observador u observadores elegidos, al llegar a casa envié un resumen de la misión al observador, siendo casi las 11:15 horas termine de formular mi siguiente plan con lo que leí en el fragmento "Digestión de un demonio" en la que explicaba que el jugo gástrico de un demonio es capaz de diluir un cuerpo demoniaco, pero, no siempre funciona bien ya que aveces puede ser rechazarlo, mientras leía, veía de reojo la mano del miembro 86 en el frasco donde la había guardado esta mañana, tomé valor y me tragué la mano, al cabo de unos segundos mi estómago empezó a hacer ruidos extraños, las ganas de vomitar empezaron y se intensificaban poco a poco con el tiempo hasta que de la nada vomite de vuelta al frasco, la mano ahora estaba en estado semilíquido y se movía con dificultad, la idea de digerirlo, vomitarlo y encerrarlos en diferentes frascos me gustaba, con esto en mente tomé un maletín donde guardaba un francotirador para armar, guardé el frasco y lo colgé en mi hombro y con dinero que tenía en la caja fuerte del sótano salí de casa.

Tomé un taxi y al rededor de 20 minutos llegué a los muelles de Waledyt de donde salen yates a Dolpyt, al llegar ví algunos guardas costeros por el área, traté de actuar con normalidad, pagué mi boleto y me dirigí al yate que me llevaría junto a más personas a la isla, los guardas costeros revisaban el interior de los bolsos de las personas para registrar y retener cosas extrañas, no había duda de que mi maletín no pasaría, pensé en sobornar al guarda.
- Abra el bolso por favor. - Dijo el guardia mientras yo enviaba un mensaje a su subconsciente "Recibelo" mientras de mi saco sacaba con cautela algunos billetes. - Siga. - Respondió el guarda al recibir los billetes mirando con disgusto a su alrededor, siendo las 12:30 horas me encontraría en el muelle de Dolpyt desembarcando, Dolpyt es una pequeña isla al oeste de Waledyt conformado de un pequeño pueblo, una pequeña selva y una amplia costa y acantilados al rededor, los muelles se encontraban en el extremo norte de la ciudad y el lugar en donde tenía que llegar era el Monte de las almas al sur de la misma, percatandome de no tener nadie siguiendome tomé un taxi y me dirigí al destino, mi reloj de mano registraban las 12:54 cuando llegue al sitio, al bajarme del taxi pude ver con gran admiración las escaleras que llevaban al templo, según investigué son más o menos 700 escaleras cuesta arriba que separan el pueblo con el Templo de las almas, a lo lejos pude divisar algo extraño así que me apresuré por subir hasta que una voz trató de detenerme.
- ¡Alto ahí! No está habilitado el servicio de turismo en este momento. - Decía un miembro del templo encargado de cuidar el paso de personas al templo.
- Venía a rezar, ¿No podemos hacer una excepción? - Decía yo mientras miraba con angustia la cima del monte, hasta que de un momento a otro unos disparos se escucharon, gracias a mi buena visión pude observar al miembro 86 a mitad de las escaleras subiendo mientras atacaba a otro miembro del templo con animales demoníacos. - Tienes que hacer una excepción amigo. - Dije volteando a ver al miembro del templo antes de empezar a correr cuesta arriba, pensando que lo estaba retando salió de su puesto de control y decidió seguirme.

Diarios: Caso de Stephanie KleinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora