una apasionada venganza

UNO SE VA ,DOS VUELVEN

Estaba decidido. Tenía que dejar atrás por completo cualquier sentimiento que pudiera albergar por Jimin. Ahora tenía a Anna, quien lo amaba y a quien él correspondía. Jimin, en su mente, debía convertirse en un simple recuerdo, una página pasada en su vida. Además, el pelirrosa, en el día anterior, había demostrado ser alguien completamente diferente. El chico que había revelado su infidelidad al mundo, el que había provocado que lo atacaran, no era el mismo Jimin por el que se había sentido tan profundamente enamorado. Aunque tenía que admitir que esta nueva versión de Jimin era intrigante y atractiva.

Pero ahora no había tiempo para dudas. Había hecho una promesa de matrimonio a Anna y estaba decidido a cumplirla. Estaba decidido a construir una vida feliz junto a ella, dejando atrás a Jimin.

EN LA EMPRESA

Jungkook llegó a su oficina vestido con un traje elegante, como siempre, aunque esta vez llegó por la puerta de atrás. Los periodistas seguían molestando y se habían amontonado en la puerta de la empresa. Cuando Jungkook llegó, lo primero que hizo fue correr y abrazar a Anna. La abrazó y la besó frente a todos los empleados de la empresa. Ellos, lejos de sorprenderse, aplaudieron, todos, menos la señora Wang, la empleada más antigua de la empresa.

-Mi amor, perdona por cómo me he comportado últimamente. Te amo, te amo - dijo Jungkook mientras levantaba por los aires a Anna.

¡AHHH, bájame, loco! - gritaba feliz Anna. - También te amo, mi amor. - Los amantes se abrazaban y se besaban felices.

-Huy, se ven tan lindos juntos. Al fin pueden vivir su amor sin restricciones - dijo Elen, una de las amigas más cercanas de Anna.

-Sí, es cierto - confirmó Lisa, la otra amiga de Anna.

La pareja se metió feliz a la oficina.

-Dime, amor, ¿qué tenemos que hacer hoy? - preguntó Jungkook.

Hoy tienes una reunión con el señor Joon Ho de Joon Corporation. Necesitas negociar con él para la próxima campaña de perfumes, mi amor - dijo Anna mientras revisaba unos papeles del escritorio de Jungkook.

-Qué molesto, es necesario hacerlo. Quiero quedarme contigo todo el día y no salir de aquí. No quiero ver a ese amargado solterón - dijo Jungkook quejándose.

-¿Qué tienes en contra del señor Joon Ho? Es cierto que no ha tenido una pareja formal nunca, pero se rumorea que ha tenido muchos amantes ocasionales - dijo Anna, curiosa. Jungkook cambio rápidamente su expresión por una muy seria cuando Anna hizo la pregunta. Al ver esto Anna se puso a pensar, Jungkook parecía odiar a Joon Ho, y si no fuera porque era estrictamente necesario que esos dos se unieran para la nueva campaña de perfumes, no se verían ni en pintura. Ambos empresarios necesitaban sacar una nueva campaña de perfumes, y les convenía hacerlo juntos, pues sabían que las ganancias eran sumamente grandes. Durante muchos años, ambos fueron rivales en el mundo de la perfumería. Aunque la empresa Jeon siempre ha estado un paso adelante, dejando atrás a la empresa Joon, sin embargo, Anna estaba segura de que la molestia que sentían esos dos no era por la rivalidad empresarial. Pues, por las pocas veces que había visto al señor Joon, se había dado cuenta de que él tampoco simpatizaba con Jungkook.

-Ese solterón y yo tenemos una cuenta pendiente. Él hizo algo que no debió hacer hace años. Pero eso ya pasó. Ahora, por favor, prepara la sala de juntas, hermosa. Quiero recibir bien a ese idiota - dijo Jungkook serio.

-Como mandes, amor - dijo la chica y salió de la oficina, no sin antes darle un beso a Jungkook.

-Hace tanto tiempo que no veo a ese solterón, más sin embargo, será divertido reírme un poco de él. Después de todo, no logró lo que buscaba hace años - Sonrió Jungkook.