III

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¿Sabía Serafina que existía lobos, metamorfos? Sí, pero no conocía sus leyendas, ni costumbres o tradiciones. Solo sabía una cosa, que no habían nacido para lastimar intencionalmente pero que el mal temperamento era el único defecto inmejorable.

Al encontrar a la joven abandonada, quizás de unos años más que ella, su curiosidad no llegó a intensificarse; bastando con saber que su pulso seguía entre los vivos tras palparla. No tuvo otro impulso de llamar a gritos a un posible salvador, ni mucho menos esforzarse por dar más que su compañía, increíblemente no se demoraron en encontrarla, o mejor dicho encontrarlas.

Drabbles - Impronta de JacobDonde viven las historias. Descúbrelo ahora