¿Insinuación inocente?

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tw: nsfw.

Aquí estás de nuevo, acompañando a tu dulce noviecito como la buena compañera romántica que eres

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Aquí estás de nuevo, acompañando a tu dulce noviecito como la buena compañera romántica que eres.

Esta vez fue ligeramente diferente, ahora tú eras la invitada dentro de la casa de tu pareja, Kunikuzushi fue quien te invito a su casa está vez y no al revés.

Según palabras de tu pareja, él te había invitado para ver una película y pasar tiempo juntos, de todas formas, él aprecia mucho tu presencia.

Aunque no podías evitar sospechar un poco de sus palabras...

No sabías si era culpa de tu mente sucia o si realmente había segundas intenciones detrás de esa propuesta, pero realmente no importaba ahora, ya estabas en el lugar junto a él.

“...Adelante, ponte cómoda.” Kunikuzushi dijo mientras abría la puerta de su cuarto, invitandote a entrar.

Tú claramente no dudaste en entrar, habían pasado media hora en la sala de estar abrazándose y dándose pequeños besos como los adolescentes enamorados y clichés que eran... Ya era hora de un poco de acción de verdad.

“Así que... Dime la verdad, ¿me invitaste a follar?” Preguntaste directamente mientras te sentabas en su cama, sin ninguna vergüenza, la pregunta sonaba más como una broma, era difícil deducir si realmente lo decías en serio o solo era una exageración.

“¡¿Q-qué?! ¡N-no! Claro que no... Solo quería pasar tiempo contigo...” Kunikuzushi dijo mientras cerraba la puerta después de haber entrado detrás de ti, sus mejillas rápidamente pintándose de un ligero color rojo ante tu insinuación.

“Vamos, Kuni... Sabes que no tengo ningún problema contigo siendo sincero conmigo...” Dijiste, riéndote por lo bajo ante su reacción, era adorable la reacción que tenía ante cualquiera de tus provocaciones...

Kunikuzushi pareció dudar por unos segundos, dudando de sus propias intenciones mientras sus mejillas se seguían pintando de aquel color rojo cada vez más intenso.

“B-bueno... No voy a negar que me gusta tenerte cerca de mi...” Él titubeó un poco, sus ojos vagando como si todavía estuviera pensando que decir...

“Y-yo... Bueno... Si es posible... Quisiera que me hicieras sentir de nuevo lo que sentí cuando... me tocaste a-allí abajo...” Kunikuzushi por fin confesó, sus mejillas sonrojandose completamente con vergüenza.

Tú rápidamente soltaste una risita ante sus palabras, pensaste que no serías capaz de empujarlo a confesar pero al parecer te probó lo contrario.

“¿En serio? ¿Quieres eso?..” Preguntaste descaradamente con el único fin de seguir avergonzandolo.

Kunikuzushi solamente asintió su cabeza ligeramente, su mirada apartada con vergüenza mientras fruncia el ceño para intentar disimular sus mejillas sonrojadas.

"¡Blandito y Sumiso!"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora