La Luz De Sus Pupilas

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...

Me desperté de golpe, asustada y sudando frio intente buscar a Howl y no lo encontraba por ningún lado, la impotencia me estaba quebrando y estaba a punto de gritar hasta que...

La habitación estaba llena de flores, su dulce aroma me distrajo de cualquier cosa y por fin pude respirar, cuando me levante vi una nota que decía que el desayuno estaba listo, que no me preocupara que debido al trabajo no podía desayunar conmigo.

Baje a desayunar con Mark y Cafe, cuando termine me di cuenta de que mi bebida estaba fría.

- Hola Calcifer, como estas?, me dejarías calentar un poco esto? 

Le dije mientras me acercaba sigilosamente a el 

- Mmm no puedo. 

Respondió de forma tierna 

-ah, y por qué no? 

Calcifer me dijo que era porque solo Howl podía controlarlo, me quede sin decir nada, mejor no pregunte y deje el café en el lavaplatos y fui a la habitación a acomodar todas las flores que Howl había dejado para mi y me percate de que en cada una había un pequeño pedacito de papel y a juntarlos con los otros escribía un pequeña nota que Howl había escrito para mi antes, el mismo que me dio aquel día de la rosa blanca.

Esta pequeña rosa jamás se marchitara

Así como nuestros momentos juntos y nuestro cariño.

PD: no me olvides y no lo haré.

Después de terminar de leer aquella nota se quemo y de sus chispas se podía visualizar unas palabras que decían "Eres la verdadera luz de mi corazón", luego podía ver de entre sus cenizas una flor blanca me sorprendí al ver que era la misma flor que el me había dado hace unos 5 años, casi 6,  y, tal como el habia dicho, no mostraba alguna señal de haberse marchitado.

Tome la rosa la estreche en mi pecho y me lance boca arriba a mi cama 

-Howl- suspire- Te amo tanto.

En ese momento cerré los ojos y quede profundamente dormida.

-Hola.

abri los ojos asustada

- volviste, que bueno verte de nuevo, Yudy.

- Que? q-que paso... oh no tu otra vez.

-si jaja, no te dejare en paz asta que lo dejes

- Entonces estarás conmigo asta la muerte.  Dije con gran decisión 

- No te creas la mejor o la mas fuerte, eres ridícula intentando defender este amor tan falso.

- No sabes de que estas hablando.

- Tu no sabes de que estas hablando.  me grita fuerte aquella sombra y sigue hablando con una voz mas agesiva.

- tu no sabes donde estas metida, no lo conoces, ni a calcifer, ni su maldici...  ups

- Su que?

- Nada

- no no no ya basta nada de nada, ya es la segunda vez que mencionas una estúpida maldición y no quieres decir nada.

-...  Tu escaza y pequeña mente de humano común no lo entendería, deja a Howl, aléjate de el.

- Y si no? ya lo dije y siempre lo diré, atorméntame, haz que no vuelva a dormir y mata mi cuerpo poco a poco, pero nuca dejare a Howl. 

- y si no?. JA.. JA.. JAJA... JAJAJAJAJAJA, estas mal  si piensas que tu, una patetica ama de casa puede luchar contra mi, estas mal, muy muy muy mal, claro y si tanto quieres morir, yo te matare.

En ese momento la sombra se convirtió en la silueta de Howl y se escuchaban diferentes voces susurrando cosas inteligibles mientras eso se acomodaba detrás de mi y rodeaba mi cuello con un gran cuchillo plateado con un mango de color negro, en ese momento la sombra me susurro al oido algo que no logre entender y me corto el cuello con rapidez.

me levante sudando nuevamente frio y Howl ya había llegado para el almuerzo, me levante lo mas calmada posible y note que esa rosa eterna estaba levemente marchita.

Vi Feliz Al Amor De Mi VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora