La hija de mis enemigos

Dos años después

Ya han pasado dos años desde que Spider conoció a Kiri, Neteyam y Lo'ak. Y dentro de poco conocería a Tuktirey, la hija más pequeña de los Sully.

En esos dos años ha aprendido manejar armas blancas, pelear en el agua y ha continuado con sus estudios académicos.
Pero también ha conocido la selva, ahora está más familiarizado sobre los seres que habitan en ese ecosistema, sabe para que se usan ciertas plantas y hongos, le ha tomado cariño a algunos animales como pequeños monos o aves. También aprecia mucho los ríos y la belleza acuática.

Además, gracias a dios amigos, conoce un poco sobre las costumbres y la cosmovisión de los Omaticaya.

Y es este último punto el cual tiene dividido a Spider. Aún quería ayudar a su especie, aún había varios humanos a los que admiraba y aún estaba acostumbrado a la tecnología.

Pero por otro lado, veía con tristeza que varios humanos no tuvieran interés alguno en cuidar a la naturaleza, la gran mayoría de ciudades humanas que había visto apenas y tenían árboles, tampoco podía entender porque consideraban una hazaña el matar animales.

Spider podía entender la necesidad de alimentarse de carne, eran omnívoros al final de cuentas, pero de eso a torturar animales hasta la muerte solo para recibir ovaciones había una gran diferencia. Tampoco le parecía correcto usar las pieles de los animales para ropa y accesorios de la forma en que los humanos lo hacían. Jamás lo diría frente a su padre, pero en ese aspecto si le parecía que los na'vi lo hacían mejor: la gran mayoría de sus prendas estaban hechas a partir de plantas y minerales, usaban muy poca piel y cuando lo hacían se aseguraban de hacer que el animal sufriera lo menos posible. Por otra parte, los humanos tenían todo tipo de tecnología para ya no necesitar pieles y aún así las usaban, algunos ni siquiera respetaban a las especies en peligro de extinción.

Spider creía que la humanidad era una especie que podía crear cosas maravillosas, la tecnología que tenían era prueba de ello, pero les faltaba respeto por la naturaleza. Por su parte, cuando llegara el resto de la compañía, Spider trataría de influir para poder llegar a un equilibrio entre tecnología y naturaleza. No podían permitirse perder este mundo también.

Spider estaba pensando en todo esto cuando escucho que Katherine le hablaba:
-¡Miles!-

-Lo siento, ¿qué decías?-

-Te decía que mañana es el cumpleaños de Samara y tenemos que festejarlo. Estoy planeando algo junto a Jhonatan, Rose y Aaron, ¿nos podrías ayudar con la comida? queremos prepararle hot-dogs y pastel, puedes ayudarnos hoy a prepararlo, solo tendríamos que dejarlo refrigerado. Los hot-dogs los haremos mañana en el momento-

-Si, cierto. Está bien, los ayudaré con el pastel. Pero temo que no puedo quedarme mucho rato en la fiesta-le dijo Miles

-¿Por qué no?-

-Bueno, es que yo, tengo algo de dolor de cabeza y prefiero no arriesgarme-

-Miles...deja de mentirme por favor-

El chico volteo a ver a su amiga, estaba paralizado, ¿acaso se había dado cuenta?

-Ya lo se Miles, se perfectamente que sigues viéndote con Kiri. Los primeros meses después de nuestra charla pensé que si te habías alejado, pero después me di cuenta de tus escapadas. Muy bien, ahora son amigos o tal vez hasta más, disfrútalo, porque dentro de 4 años ella se dará cuenta de la verdad y va a odiarte- le dijo Katherine

Miles nunca había escuchado a su amiga hablar en un tono tan serio

-Kathy, se que solo querías ayudarme, pero encontraré una forma de resolverlo. No voy a dejar atrás a la humanidad, pero, son buenos chicos, no se merecen que les haga la guerra-