La hija de mis enemigos

Preparando el escape

-Katherine calma por favor-

-Nos van a invadir y pretendes que me calme, ¡en serio!-

-Ok, no te calmes, pero escúchame por favor-

Katherine giró los ojos y suspiró

-Maldita sea...bien, habla-

-Mira, los na'vi no están dispuestos a quedarse sentados mientras los humanos llegan. Han estado preparandose para defender su tierra. El primer paso será atacar está base y la ciudad que se quiere construir. Katherine, le he pedido a Jake y a Neytiri que a ti, a tus madres, mi padre y a mi nos den asilo en Hell's Gate bueno, a la gente de la bodega también-

Katherine se quedó callada unos segundos mientras veía con una expresión indescifrable a Miles.

-Miles...bueno, sabía que este momento llegaría y sin embargo...esto me sigue siendo muy complicado-

Katherine se detuvo un momento y soltó unas lágrimas.

-Miles....solo queríamos jugar en el bosque...solo un maldito día al aire libre. Y mira como termino-

A Miles se le estrujó el corazón al ver a su mejor amiga llorar, por lo que se acercó a ella para abrazarla.

-Kathy, lo siento. Nunca quise lastimar a nadie....yo solo....solo quería que esa niña na'vi no se sintiera mal-

Katherine correspondió el abrazo.

-Miles...yo ya acepté que tú quieres a Kiri y que...harás esto por ella y por tu amor a todo lo que ella te enseño sobre este mundo. Pero, ¿cómo harás para que tú padre lo acepte?-

Miles permaneció en silencio unos momentos para luego suspirar

-No lo sé, he intentado mostrarle el bosque, pero siempre hay algo que hacer, ya sea él o yo-

-Entonces tienes grandes problemas, no solo no te va a escuchar, tampoco irá contigo-

Miles se quedó callado, pero Katherine pudo sentir como las lágrimas caían sobre su cabeza

-¿Y tus madres?-

-No lo creo Miles, ellas son leales a tu padre-

-¿Cómo se supone que los salve si no quieren irse?-

-Desde hace años ellos ya habían escogido su bando. Tu decidiste cambiarte, ahora debes seguir el camino que elegiste-

-Y tu Katherine, ¿qué has elegido?-

La chica bajo su mirada unos momentos, no emitía ni un sonido.

-Lo sabré en su momento-

Al día siguiente, cuando Katherine y Miles comían junto a sus compañeros Lyle llegó abruptamente al comedor

-¡Dejen eso y vengan conmigo inmediatamente!-

Todos obedecieron al instante aunque no sabían que pasaba, sólo Miles se atrevió a preguntar que sucedía

-Lyle, ¿qué pasa?- preguntó mientras caminaba

-Los imbéciles de abajo, están causando un alboroto-

-¿Por qué?-

-Eso da igual, lo importante es detenerlos y encarcelar a los responsables-

Miles ya no dijo nada, solo podía continuar caminando mientras pensaba que hacer, si había una revuelta lo más probable es que Ethan estuviera involucrado.

Antes de ir a la bodega, Lyle los llevó a un pequeño cuarto en donde rápidamente les fue repartiendo una macana a cada uno de los jóvenes. Después de eso se dirigieron rápidamente hacia la bodega. Al entrar había un caos, la mayoría de jóvenes y adultos peleaban a golpes contra los guardias. Los ancianos, los niños y adultos de aspecto demacrado se habían arrinconado en un rincón. Los niños lloraban de pánico mientras los adultos mayores los abrazaban e intentaban calmarlos, pero era evidente que ellos también tenían miedo.