⚝ All for your love .. ੭ [ Noco ]

♡ Chapter 8 : Ezekiel

Había sido una tarde bastante divertida pero agotadora.

Noah, Emma y Kitty habían pasado a tirar huevos a casas que se encontraban por ahí.

No invitaron a su amigo Owen por la simple razón de que apenas y podía correr, le dijeron y lo entendió. Si esque se daba la oportunidad de que los acompañe, no podía ni con su existencia.

Ya era de noche y Noah estaba en un taxi regresando a casa, mientras miraba su teléfono, con ya ganas de ir a dormir.

" Quedé todo sudado. . Definitivamente no volveré a tirar huevos, debería tomarme un baño. " Pensaba el moreno, dejando su celular y mirando la ventana, ya le faltaba poco para poder bañarse y dormir.

Al llegar, sus padres no se encontraban.

" De seguro ni comida preparada me dejaron, como siempre. " Pensó, restándole importancia.

Le había llamado la atención una pequeña nota de color rosado que había en el refrigerador, se acercó y la leyó.

" Fuimos a ver a tus primos, prepárate algo de comer. Quedó un poco de pan en el mueble y unos tomates dentro del refrigerador.

Si cuando regrese, te encuentre desangrado nuevamente, te llevaré al internado y no saldrás de ahí hasta que los médicos digan que estas completamente bien.

- Mamá. "

Al terminar de leer aquella nota, la arrugó y la tiró a la basura, para después subir a su habitación y tirarse en la cama.

Se subió las mangas de su ropa, observando cada cicatriz que había en su brazo.

No se arrepentía de haberse hecho todos esos cortes, pero no quería que sus padres los vieran, menos su mejor amiga.

Pero ya no había vuelta atrás, deseaba con que existiera una máquina del futuro, ir al pasado y nunca haber visto ese beso.

Se iba a levantar pero sus ánimos no lo dejaban, cerrando los ojos lentamente hasta quedarse dormido.

"07:00 A.M"

Noah se encontraba desahogandose con Emma sobre temas personales en la azotea.

No faltaba mucho tiempo para volver a clases, pero a la asiática no le importaba, solamente quería que el moreno se encontrará bien.

-Noah, tienes que hablar con tu padre en algún momento, lo que hace no está bien. - Decía Emma, consolando al chico que tenía al lado suyo abrazandolo, intentando hacerlo sentir cómodo.

- ¿Estás segura? Siempre es lo mismo, nunca cambiará.- Contestó el moreno, levantando la cabeza para ver a la asiática, tenía la voz frágil, intentaba no ponerse a llorar en frente de su mejor amiga como la otra vez.

- Solamente tienes que confiar en tí mismo.- Emma acariciaba la espalda de Noah, intentando calmarlo para volver a clase.

Tocó el timbre, era el momento de regresar al salón.

- ¿Prefieres quedarte aquí o te acompaño a tu sala?- Preguntó la asiática a su amigo.

- Me voy a quedar aquí, no te preocupes. - Respondió Noah, soltando a Emma y mostrándole una sonrisa notoriamente forzada.

El moreno estuvo varios minutos intentando convencer a su amiga de irse a clases sola.

Finalmente, Emma aceptó y antes de irse le dió un abrazo a Noah, regresando a su clase.

- Desearía que Cody estuviera abrazandome mientras se come esos dulces raros que siempre lleva escondidos.- Decía el chico mirando el piso, sin expresión alguna.