𝑉𝐼𝐼

606 33 1
                                    

{narrador omnisciente}

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

{narrador omnisciente}

La castaña estaba recostada en su cama mientras se cubria la boca con su mano. ¿Desde cuando le importaba más un hombre que su familia?

Daella se sentó en la cama, sollozando y con las mejillas sonrojadas.
Se levantó y camino hacia la mesa de noche, tomando la copa de agua y sirviéndose un vaso.

El vaso se mantuvo sujeto fuertemente por Daella, sin embargo no parecía haber intenciones de ser bebido.

La puerta de los aposentos fue tocada, Daella se sobresalto y el vaso casi cae de sus manos.

—¡Adelante!

Exclamó en voz baja la castaña.
Una doncella entro a los aposentos con la cabeza agachada.

—Lo siento mi princesa, el príncipe Aemond requiere su presencia en sus aposentos.

Dijo la doncella para irse.
Daella se quedo estática. ¿Tan tarde?
Suspiro poniéndose una bata de seda por encima del camisón, se puso los zapatos y salió de los aposentos.

Cuando llego frente a la puerta de los aposentos de Aemond apretó la bata con sus manos antes de tocar las puertas.

Escucho un ligero "adelante" dentro de los aposentos, abrió la puerta de los aposentos e hizo una leve reverencia.

—Mi principe...

—Daella, querida sobrina.

Aemond estaba sentado frente a la chimenea, una pierna sobre la otra y su mirada parecía estar perdida en las llamas ardientes.

—¿Es algo importante? Si alguien se entera de que estamos juntos a estas horas podrían pensar otra cosa... 

Murmuró Daella.
Aemond se levanto de la silla donde estaba, caminando hacia Daella.

—No tienen nada de que hablar. Les cortare la lengua si se atreven a calumniarte con mentiras. 

Dijo Aemond tomando a Daella por los antebrazos y acercandola a él.
La castaña abrió ligeramente los ojos en expresión de asombro, miro a Aemond y a su parche.

—Aemond, qué cosas dices...

Dijo Daella sonriendo levemente, en un intento de disimular sus nervios.

—No tienes por que estar nerviosa querida. Nadie tiene el permiso de entrar a mis aposentos sin mi permiso, ten por seguro, qué nadie nos molestara. 

Daella giro uno de sus anillos, mirando hacia el suelo.

—Ven, acompañame.

Dijo el mayor tomando la mano de la castaña suavemente, llevándola hacia los sillones frente a la chimenea.

—¿Acaso no duermes? Es tarde para que aun estes despierto. 

Murmuro Daella mientras se sentaba junto a Aemond.

—Duermo lo necesario, y no siempre son sus 9 horas princesa. Aveces, el deber es aun más importante que el sueño. 

Daella sonrió.
Ese "9 horas" era una clara referencia a cuando Daella regañaba a Aemond por dormirse tarde de niños, qué debía dormir al menos 9 horas como ella.

—¿Puedo preguntar cuales son esos deberes?

Murmuro Daella. Aemond la miro, sin embargo no contesto.

—Eres la dama más hermosa de la corte... ¿Por que te hieres a ti misma?

Dijo Aemond, tomando las manos lastimadas de Daella.

—No es algo que debería importarle principe. 

Dijo la castaña intentando soltarse del agarre de Aemond, pero este en cambio acarició con suavidad las cutículas rojas y lastimadas de la menor.
Ante la sorpresa evidente de Daella, Aemond llevo su mano a sus labios, besando ligeramente las zonas lastimadas.

—Te prohíbo volver a lastimarte de esa manera.

Dijo el principe, soltando la mano de Daella con suavidad.

La castaña asintió brevemente, mirando hacia otro lugar de la habitación.

—Ve a dormir, te saldrán ojeras...

Susurro Aemond después de algunos segundos de silencio, a lo cual Daella se levantó del sillón caminando hacia la puerta de los aposentos.
Hizo una reverencia rápida para abrir la puerta e irse.

Sus dedos fueron inconscientemente hacia sus cutículas, acariciando suavemente las zonas besadas por Aemond.

[...]

Rhaenyra observaba los aposentos vacíos de su única hija, con su mano en su vientre.

—El sentimiento de que la estoy perdiendo para siempre...

Susurro para ser abrazada por la espalda por su esposo, quien suspiro.

—Ella decidió quedarse en la fortaleza Nyra, no puedes hacer nada ya. 

—No... pero pude haber echo algo para impedirle quedarse. ¿En que momento permití eso? 

Se cuestióno Rhaenyra.

—Esta comprometida con ese tuerto, por más horrible que suene. Sufrirías más al momento de dejarla ir ahora si para siempre cuando se casara con Aemond.

Rhaenyra suspiro, acariciando su vientre.

—Luke ya extraña a su hermana y apenas es un medio día, no se que pasara cuando pasen días, semanas, meses...

—Tiene que acostumbrarse, así como lo haremos todos... ¿Cierto?

Rhaenyra asintió ante las palabras de Daemon, dándose la vuelta para quedar cara a cara con el.

Daemon llevo una de sus manos al vientre de Rhaenyra, presionandolo suavemente.

—¿Qué quieres ahora?

Murmuro Rhaenyra, sonriendo levemente ante las caricias de su esposo.

—Quiero una niña, una niña fruto de nuestro amor.

La princesa de Dragonstone sonrio, ante la mirada atenta de Daemon.

—Ya encontré en huevo perfecto para nuestro hijo. Es manada de Caraxes y Syrax.

Hablo Daemon, a lo cual Rhaenyra asintió poniendo su mano sobre la de el.

—Daella siempre insistía en conocer la historia de Vermithor, y jugar con el —. Rio Rhaenyra, recordando como una pequeña Daella de 5 años intentaba entrar a la foza de dragones sin supervision solo para buscar al gran dragon Vermithor —. Aunque, a final de cuentas pudo obtener un dragón digno de ella.

—Ella consigio uno. Uno tan grande como Vhagar o Balerion. Vermithor, solo más pequeño por debajo de Vhagar... ¿Y sabes que es lo mejor? Que se lo gano ella misma.

Sonrió levemente Daemon.

Rhaenyra sonrio ante las palabras de su esposo, mirándolo rápidamente.

—Se que es difícil Nyra, pero debes aprender qué en algún punto Daella hará su vida. Sea con Aemond, un Lord cualquiera o como una amargada septa, ella hará su vida.

Rhaenyra asintió ligeramente, suspirando.
Abrazo a Daemon, recargando su cabeza en el pecho del hombre.

Su niña estaba segura en la fortaleza roja, debía confiar en la promesa que le había echo Alicent...


































Tik tok:Vtmsi3_

TRAITOR ~fanfic Aemond Targaryen~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora