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Michael.

Después de hacerle varias pruebas, los doctores nos dijeron que solo era propofol y nada más. Despertaría al cabo de unas horas y podríamos regresar a casa. Que solo habría que esperar a que Susie despertara, que todo estaba bien.
Sólo quería eso, que ella estuviera bien y poder estar con ella todo el tiempo que fuera posible mientras estuviera aquí. Al menos, Murray no había puesto nada más en la jeringuilla.

Pasaron como unas siete horas desde que Susie ingresó en el hospital y aún no despertaba. Me quedé con ella en la habitación, sin importarme que a cada instante llegaran enfermeras con la excusa de mirar los signos vitales de Susie, solo porque yo estaba allí. Las pillaba mirándome de reojo o sonriéndome al pasar, pero no me importaba, solo quería que Susie despertara. Más de una vez, las oía en la puerta de la habitación diciendo:
- ¡Es verdad! Michael Jackson está en la habitación con esa chica.
- Siempre lo he adorado.
Y así se pasaban las horas. Al menos, me provocaban sonrisas y la estancia allí se hacía más llevadera.

Serían como las cuatro de la tarde, había dormido algo, a ratos, con tal de estar pendiente de Susie. Me acerqué a la cama de ella y tomé su mano, sentándome a su lado.
- Tengo ganas de que abras los ojos y saber que estás bien del todo. Necesito oír tus risas, tu voz y ver cómo me miras con tus bonitos ojos, Susie.
Y, de repente, sus bonitos ojos, se abrieron, como si hubiera escuchado lo que decía.
Parpadeó un par de veces, y se quedó mirandome fijamente. Sonrió levemente al verme a su lado.
- ¡Estas aquí, Michael!- exclamó.
- ¿Y donde voy a estar, tesoro?- pregunté riendo.
-¿Qué día es?- preguntó ella a su vez.
- 26 de junio del 2009.
Me miró de nuevo y vi que sus ojos se llenaron de lágrimas, las cuales se deslizaron por sus mejillas. No entendía nada de por qué lloraba.
-¿Qué te pasa, Susie?- pregunté extrañado.
- Estás aquí. ¡Estas aquí!- dijo y tomando mis dos manos, se las llevó a la boca para besarlas.
No entendía nada de lo que pasaba. Iba a volver a preguntarle, cuando la puerta de la habitación se abrió y entró la doctora que llevaba el caso de Susie.
-¡Oh! Veo que has despertado. Me alegra. Señor Jackson, si es tan amable de dejarme revisar a su novia un momento... - me levanté de la cama y mi lugar lo ocupó la doctora.
Susie no quitaba sus ojos de mí. Parecía que no estuviera segura de que fuera yo. Respondía a lo que le decía la doctora, pero no apartaba sus ojos de mí. No entendía por qué me miraba así.

Tras unos minutos, la doctora se levantó y dijo:
- Bueno, Susie estás perfectamente. Voy a ir a firmar tu alta. Sólo te recomiendo descanso unos días y que bebas mucha agua para eliminar pronto el propofol. Vas a estar algo más cansada de la cuenta, pero es por lo que te han inyectado. Así que descansa y si te encuentras mal, regresa, ¿Vale?
- Si, doctora.
- Perfecto, entonces. - se levantó y antes de salir, dijo - En la sala de espera están tus amigas, ¿las dejo pasar?
- Claro, doctora, que pasen - dijo Susie y por un momento desvío la mirada a la doctora, que salió y volvimos a quedarnos solos un par de minutos.
Susie aprovechó para dirigirse a mí:
- ¿Podemos hablar cuando lleguemos a casa?
- Claro, Susie, sin problema.
Y en esas, entraron Diana y Viole, quienes, nada más entrar, se abrazaron a Susie.
- ¡Susie, creía que te iba a pasar algo malo!- exclamó Diana.
- Entonces hubiera sido el fin de ese malnacido con patas - dijo Viole.
Aquellas palabras nos hicieron reír a todos.
Diana se giró hacia mí y se acercó para abrazarme:
- ¡Cuánto me alegro que estés aquí, Michael!
- Pero, ¿qué os pasa a vosotras?- pregunté extrañado.
Noté como las chicas se miraban entre ellas, sabía que estaban ocultando algo. Susie volvió a hablar.
- En casa hablamos. Es algo importante, Michael.
- Pero...- empecé a protestar.
- En casa, cariño - repitió Susie.
Asentí.
A veces, no entendía a las mujeres.

Poco después, Susie recibió el alta y nos marchamos acompañados de Diana y de Viole. Nada más llegamos a casa, hice a Susie tumbarse en la cama. Aunque protestó, lo hizo. Es más, volvió a quedarse dormida poco después.
Al menos, no le había sucedido nada malo y la tenía aquí conmigo. No quería ni imaginar si le hubiera pasado algo, yo sufriría mucho y ella no podría volver a su tiempo si algo malo le pasara aquí en el pasado.
¿Tendría que ver esto con lo que me quería decir?

Remember the time (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora